Sacos de papel de Industrias Bolcar

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Industrias Bolcar crea un saco de papel que reemplaza el plástico en la construcción

Este material ofrece una alternativa más sostenible con una vida útil de más de seis meses

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La sostenibilidad y la reducción de residuos son los grandes retos de la industria actualmente. Cada vez más se idean nuevas iniciativas con el objetivo de hacer la actividad industrial más amable con el medio ambiente. En este contexto aparece la empresa catalana Industrias Bolcar que ha desarrollado un nuevo saco de papel que reemplazaría el uso del plástico en la construcción.

Hasta ahora, en el sector de la construcción se ha empleado plástico para el almacenamiento del cemento y otros productos necesarios en la industria. Este nuevo tipo de papel barnizado con una solución sostenible garantiza las mismas cualidades y condiciones aislantes que los productos que se usan actualmente que son más difíciles de reciclar.

Según ha informado el Departament de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica y de Empresa y Trabajo de la Generalitat, el proyecto ha contado con el apoyo de Acció --la agencia del Govern para la competitividad de las empresas catalanas-- con 107.797,83 euros de la línea de ayudas para iniciativas de I+D Green en el ámbito del cambio climático. Esta prestación se enmarca dentro de la dotación del Fons Climàtic de Catalunya.

Mejores cualidades

Anteriormente, Industrias Bolcar, especializada en sacos y otros tipos de embalaje, usaba bolsas de papel con una capa interior de plástico en sus productos para conseguir ese efecto aislante. Sin embargo, este tipo contaminaba el doble y lo que han buscado con este nuevo barniz es ofrecer una solución más sostenible que deje menos residuos.

Era importante para el equipo de I+D de la compañía encontrar una solución que garantizara la resistencia del material y su propiedad aislante ya que la mayoría de clientes pertenecen a la industria de la construcción o la alimentación. El nuevo producto ya es totalmente funcional y además de ser mejor para el medioambiente, también ha mejorado las condiciones de los anteriores a largo término, con una vida útil de más de seis meses.

Actualmente la empresa ya ha realizado una primera prueba piloto con una compañía del sector de la construcción y está previsto adaptarlo para usarlo para almacenaje de productos de alimentación animal.