Júlia Nueno, en la sede de Galaxia Gutenberg

Júlia Nueno, en la sede de Galaxia Gutenberg

Ideas

Júlia Nueno y el "genocidio" en Gaza: "Israel ha destruido panaderías y hospitales de forma sistemática"

La investigadora, que forma parte de la agencia Forensic Architecture, ha coordinado el libro 'Genocididos' en el que se pone de manifiesto la práctica "colonial" de Israel en Gaza, con un intento deliberado de eliminar o provocar el desplazamiento masivo de la población palestina

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“Hay huellas, el territorio deja constancia de las violencias que sufre”. Lo señala Júia Nueno Guitart, ingeniera e investigadora, que forma parte del equipo de Forensic Architecture, donde filósofos, arquitectos e ingenieros tratan de recomponer lo que se ha destruido en países que han sufrido la violencia. Nueno ha coordinado el libro, con aportaciones de varios expertos, Genocidios, una lectura forense (Galaxia Gutenberg), en el que se constata la práctica “colonial” de Israel, y el intento de su gobierno de acabar con la población palestina en Gaza, o bien de forzar un desplazamiento masivo.

Nueno afirma, en esta entrevista con Letra Global, que la intención de Israel se comprueba en el territorio. Con una importante tecnología a disposición, el equipo de Forensic Architecture, con sede en Londres, ha reconstruido lo que ha llevado a cabo el Ejército israelí, como el asesinato de la niña palestina Hind Rajab y de su familia cuando trataban de huir en coche. La corta distancia entre los soldados y el coche no deja dudas: sabían que iban dentro una niña. Nueno señala que “la destrucción de panaderías y hospitales ha sido sistemática”.

Y lo que llama la atención es, precisamente, ese primer objetivo, el de las panaderías. “Con la idea desplazar la población hacia el sur de Gaza, la destrucción de panaderías en el norte fue sistemática, teniendo en cuenta que se había bloqueado el acceso de ayuda humanitaria”, señala Nueno, que indica que Israel utiliza a fondo su tecnología, la Inteligencia Artificial, para destruir objetivos precisos.

La agencia radicada en Londres, con expertos de diferentes ámbitos, también entre ellos judíos, también cuenta con tecnología para reconstruir todos los pasos del Ejército de Israel. Y lo que demuestra es la destrucción, también, de la infraestructura médica en Gaza.

Júlia Nueno, en la entrevista con 'Letra Global, en la sede de Galaxia Gutenberg

Júlia Nueno, en la entrevista con 'Letra Global, en la sede de Galaxia Gutenberg

Ha existido en los últimos dos años un plan generalizado de destrucción. Hay un patrón que se repite. Los investigadores comprueban ataques en una misma dirección: “Primero ambulancias y generadores eléctricos, luego órdenes de evacuación, ataques a las inmediaciones, asedio y, finalmente, invasión. Al analizar miles de mensajes acerca de los eventos en otros hospitales de Gaza, confirmamos que, a mediados de diciembre (2023), los ataques israelís seguían patrones similares, dejando 16 de 17 centros médicos fuera de servicio. Estas tácticas se repetirán durante la invasión de Jan Yunis, entre enero y marzo de 2024, y en Rafah, entre mayo y junio de 2024”, asegura Nueno en el prólogo del libro.

La investigadora habla de Raphael Lemkin, el jurista judío nacido en Lviv (hoy Ucrania, en su día de cultura judío-alemana dentro del Imperio Austro-húngaro), que trató por todos los medios durante los juicios de Núremberg de que los altos jerarcas nazis fueran juzgados por genocidio. Él fue quien teorizó sobre el delito. Sin embargo, Estados Unidos no lo incorporó en los juicios. La idea de destruir un pueblo y su cultura implicaba que otros países pudieran haber incurrido también en ello, como Estados Unidos respecto a los pueblos indígenas. Así lo interpreta el abogado Philippe Sands en el extraordinario libro Calle Este-Oeste.

Pero Lemkin sigue muy presente. “Lo que él defendía no era sólo una destrucción física de un pueblo, sino también la destrucción de las posibilidades de mantener una cultura”, afirma Júlia Nueno.

Y eso es lo que se manifiesta en el libro Genocidios, que hace referencia a la violencia de otros países, de Alemania en Namibia, por ejemplo.

El trabajo de Forensic Architecture ayuda a Sudáfrica para mantener el caso de Sudáfrica contra Israel, que sigue vivo en la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Nueno se refiere al concepto de genocidio de Lemkin, que fue el jurista que lo puso sobre la mesa. “La investigación de Forensic Architecture lo que indica es una campaña sistemática y organizada para destruir la vida, las condiciones necesarias e infraestructuras que la sostienen, como demuestra el ejemplo del ataque repetido a hospitales”, asevera Nueno.

Portada del libro coordinado por Júlia Nueno

Portada del libro coordinado por Júlia Nueno

Producto de esa investigación es el ensayo visual ‘Cartografía del genocidio’, que se incluye en la selección de textos que ha coordinado Nueno. El plan de Israel lo abarca todo: “Se expone en la cartografía el diseño estratégico del espacio en Gaza para el desplazamiento y control de la población, así como los patrones de destrucción de la agricultura, los recursos hídricos, la infraestructura médica, civil y de ayuda humanitaria”.

Nueno incide en un modelo “colonial”, y entiende, por tanto, que países como Sudáfrica hayan sido los más interesados en denunciar ante los tribunales a Israel. Frente a la pasividad de Occidente, la lentitud de la Unión Europea, “con ejemplos importantes y distintos como el mostrado por Pedro Sánchez en España”, ha sido “el sur global” el más incisivo frente al estado de Israel.

Ello lleva a la reflexión sobre el modelo colonial. Occidente quiere mantener el status quo, con Israel como socio en Oriente Próximo. Y el sur global, que presenta una enmienda a la totalidad frente a esa situación, es el que empuja para llevar a Israel a los tribunales.

“El acuerdo de Trump no ha arreglado nada. Veremos qué sucede en los próximos meses, pero hay que tener paciencia. Seguramente este proceso será largo”, indica Nueno, que se concentra en esa acumulación de pruebas, en esa reconstrucción técnica y científica sobre “el genocidio” en Gaza.

El libro impresiona. Las aportaciones abarcan todos los ángulos, con artículos de Eyal Weizman; Rabea Eghbariah y Joshua Abramson Cohen; Dima Srouji; Agata Nguyen Chuong; Grégoire Chamayou; Marwa Fatafta y la propia Júlia Nueno Guitart, que imparte clases en la Universidad de Londres.