La cuarta temporada de The Crown ha llegado a un momento muy peliagudo en la historia reciente de la familia real inglesa. La relación de Lady Di con Carlos de Inglaterra.
Si hasta ahora la Casa Real permanecía en silencio respecto a la controvertida serie, esta vez ha dado señales de estar más que molestas.
"Troleo"
Fuentes cercanas al príncipe Carlos aseguran a Daily Mail que la producción de Netflix busca “explotar el dolor de los Windsor para obtener ganancias”. Los acusan de “trolear con un presupuesto de Hollywood” y hacer pasar “la ficción como realidad”.
Poco habían dicho hasta ahora, claro que hablaban de la historia de la corona sucedidas hace años. “En este caso, es arrastrar cosas que sucedieron en tiempos muy difíciles hace 25 o 30 años sin pensar en los sentimientos de nadie. Eso no es correcto ni justo, especialmente cuando muchas de las cosas que se representan no representan la verdad”, lamentan.
Príncipes en Netflix
La casa de Windsor está más que sorprendida. Sobre todo, porque ahora los duques de Sussex, el príncipe Harry y Meghan Markle han firmado un contrato millonario con la plataforma de contenidos estadounidense.
La monarquía inglesa no está sola en las críticas a Netflix y a la serie. Periodistas afines reprochan que el relato que ofrece es algo “inexacto”.