Los yoguis cada vez abundan más y se han convertido en auténticos devotos de esta filosofía de vida. Aunque es cierto que el yoga es una práctica milenaria, parece que es actualmente cuando somos más conscientes de sus bondades. En concreto, es una práctica que conecta el cuerpo, la respiración y la mente. Para ello se emplean diversas posturas físicas, además de ejercicios de respiración y meditación. Todo ello redunda en una mejora de la salud y el bienestar.

Por lo tanto, no es de extrañar la pasión que muchos le profesan ya que ayuda a reducir el estrés, a conciliar el sueño, mejora la digestión y también tiene beneficios para la concentración, entre otras virtudes. Eso sí, no todos los yoguis practican la misma modalidad, pues existen diferentes versiones de esta disciplina.

Múltiples opciones de yoga

De hecho, el plantel de tipos de yoga puede ser abrumador para una persona que baraje iniciarse en esta actividad y no sepa por dónde tirar: ashtanga o de poder, bikram o caliente, hatha yoga, integral, iyengar, kundalini o viniyoga son algunos de ellos. Sin duda, una manera de conocer un poco más esta práctica ancestral y ahondar en sus postulados es a través de los diferentes documentales que se han rodado al respecto.

Todos ellos nos revelan el yoga en su estado más puro. Muchos yoguis ya han incluido alguno de estos documentales entre sus películas de cabecera. No obstante, es muy factible que algunos se les escapen. Vamos a ver cuáles son.