Catorce libros ilustrados para celebrar el Día de la Mujer
Las editoriales y sellos infantiles y juveniles ofrecen en sus catálogos títulos que rescatan a los grandes personajes femeninos de la cultura y la ciencia y reivindican la igualdad como acto de celebración del 8M
5 marzo, 2024 19:00El 8 de marzo es un día de celebración y de reivindicación. Todavía hay mucho por recorrer. Es el día para reivindicar con más fuerza los derechos de las mujeres, unos derechos que, como el del aborto, todavía se cuestionan y que, en muchos países, no se reconocen. El 8 de marzo es también un día para llamar la atención sobre las violencias físicas y simbólicas que sufren las mujeres y combatir las desigualdades -laborales, económicas, sociales- que persiste y que, en muchos países, son flagrantes. Una jornada de concienciación, sobre todo, para las generaciones más jóvenes, que todavía no saben lo difícil que es ganar derechos y lo fácil que es perderlos. Hablamos de generaciones de niñas y de niños educados en valores feministas, transversales y que permiten pensar en un futuro mejor donde estos derechos sean realmente incuestionables. Aquí proponemos una selección de libros para celebrar el 8 de marzo a través de títulos que dan a conocer a las grandes mujeres de nuestra historia, cuestionan los roles de género, la desigualdad y la cosificación de las mujeres y que hablen de respeto, diversidad, aceptación, igualdad y libertad.
Clara Campoamor de Manuela Carmena (Schackleton Books): Dentro de la colección de Mis pequeños héroes, este libro rescata la figura de Clara Campoamor para acercarla al público más pequeño. Como en los otros libros de la colección, aquí Clara Campoamor cuenta su historia en primera persona: “Crecí en una España con enormes desigualdades entre las mujeres y hombres y decidí cambiar esa situación”, leemos en las páginas finales de este libro, en el que su autora, Manuela Carmena, se detiene en los episodios principales de la vida de Campoamor, haciendo hincapié en las dificultades que tuvo que enfrentarse hasta conseguir, primero, convertirse en abogada y, posteriormente, entrar en política y en el Congreso, donde se encontraría con Victoria Kent. Un libro clave para que las nuevas generaciones sean conscientes de que cuánto costó conquistar unos derechos que la dictadura eliminó, porque cuesta mucho conquistar derechos y nada perderlos. Esto nos enseña este libro, que además ofrece a las niñas un referente a partir del cual convertirse en unas ciudadanas comprometidas y que, lejos de darlo todo por sentado, luchan y reivindican sus derechos, pues todavía hay mucho camino que recorrer.
Solo soy mía de Raquel Díaz Reguera (Nube Ocho): No es fácil hablar del maltrato a los más pequeños, pero es una realidad que no se puede ocultar, ante todo porque son muchos los menores que viven en sus casas la violencia de género dentro de sus casas. Raquel Díaz Reguera, autora también de títulos tan esenciales como Cuando las niñas vuelan alto o Yo soy, consigue contar esta terrible situación a través de Ratona, cuya pesadilla empieza cuando se va a vivir con Ratón, que, poco a poco, se va transformando en un terrible felino: los desprecios se transforman en prohibiciones y las prohibiciones en violencia verbal y luego física. Ratona se hace cada vez más pequeña y él cada vez más grandes hasta que un día decide que no puede seguir aquí y lo abandona. “¡No soy tuya, ni de nadie! ¡Soy solo mía!”, se dice a sí misma Ratona. Y esto es lo que deben aprender las niñas en la medida que crecen, que no pertenecen a nadie, que su libertad no puede serle arrebatada por nadie. Solo soy mía es un cuento importante que las madres haremos bien en leer y explicar a nuestras hijas, pero también a los niños, pues tan importante es concienciar en los derechos de la mujer y la lucha contra la violencia de género.
El niño que no quería ser azul. La niña que no quería ser rosa de Patricia Fitti (Destino): Este libro es ya de por sí un clásico, habiendo alcanzado su sexta edición. Un cuento que cuestiona los roles de género a través de la figura de Celestino, un niño al que, desde que nace, visten de azul. Todo es azul en su vida. Crece escuchando que los niños no lloran, que ya es un hombre y que pronto encontrará su princesa rosa. Pero a Celestino ni le gusta ser todo azul como esperan de él ni le gustan las princesas rosas, porque le parecen aburrida. Un día conoce a Rosa, una niña que era todo lo que había soñado, una niña con la que explorar todos los colores, huyendo del azul y del rosa. Porque ni los niños son azules ni las niñas son rosas. Porque la libertad reside en poder ser de todos los colores, en escapar de las imposiciones de género y en las expectativas de un mundo que no te deja ser como tú quieres ser. Un libro para niños y niñas, para todos.
Operación bikini de Júlia Barceló y Camille Vannier (Flamboyant): Las imposiciones estéticas son una de las violencias más recurrentes que las mujeres sufren desde que son unas niñas. Sobre el cuerpo, desde muy pronto las niñas y adolescentes proyectan una serie toda una serie de imposiciones estéticas provenientes de la sociedad, imposiciones que provocan un malestar con el propio cuerpo e, incluso, un rechazo. Esto es lo que le sucede a Sol, la protagonista de este cuento, cuando se entera de que su amiga quiere celebrar su fiesta en la playa, Sol se preocupa. Está convencida de que para poder ir a la playa su cuerpo tiene que cambiar y, para ello, necesita hacer dieta y ejercicio. Sol está convencida de que su cuerpo no puede mostrarse así en la playa. En el gimnasio, no puede “evitar ver un montó de chicas con cuerpos fantásticos y tonificados”, mientras que ella se siente como una “morsa premenstrual desnudándose delante de todas esas diosas”. Un libro sobre la aceptarse a una misma y al propio cuerpo, sobre las imposiciones estéticas como una violencia sistemática, sobre la cosificación del cuerpo femenino y la necesidad de liberarse de todos estos dictámenes estéticos.
Mercedes Pinto. La escritora que abrió ventanas de colores de Alicia Llarena (Vegueta): Escritoras, pintoras, escultoras… artistas, en definitiva, que han sufrido el olvido son muchas. Los manuales escolares todavía se sustentan en todos estos olvidos y las niñas y adolescentes estudian sin apenas conocer referentes femeninos en quien reflejarse. La escritora canaria Mercedes Pinto es una de las tantas autoras que ha pasado al olvido y, de hecho, hoy es casi imposible encontrar en librería una de sus obras. Esta escritora feminista que se marchó a Uruguay a principios de los años veinte y que nunca volvió a España, muriendo en México, país donde finalmente se instaló, es la protagonista de este libro. Llarena acerca su figura a las lectoras más pequeñas, descubriéndoles así una figura clave de la literatura y del arte y asimismo a una mujer que pasó su vida comprometida políticamente, defendiendo los derechos de las mujeres, apoyando la República y solidarizándose con los judíos que llegaban a Cuba huyendo de la barbarie nazi. Una mujer que ojalá las niñas tengan como referente.
Rosa caramelo de Adela Turin y Nella Bosnia (Kalandraka): Libro de gran belleza de una manada de elefantes en la que todas las elefantas son de color rosa. Pero el color no es lo único que las distingue de sus compañeros machos; desde que nacen no pueden hacer tantas otras cosas que sí hacen los machos. Crecen encerradas en un recinto, comiendo anémonas y peonías, porque dejan la piel más suave, los ojos más resplandecientes. Llevo zapatos también rosa y cuidan su imagen; deben hacerse guapas, les dice el viejo elefante, de lo contrario ningún elefante querrá casarse con ellas. Mientras ellas esperaban encerradas a crecer y hacerse guapas, los jóvenes elefantes jugaban, comían hierba y dormían bajo los árboles. Margarita, sin embargo, no como las suficientes anémonas y, por esto, su piel es gris. Pero a ella no le importa; ella no quiere comer anémonas ni estar atrapada en un recinto; por esto, un día decide salir por la sabana, correr y mancharse de barro como lo hacen los elefantes machos. Rosa caramelo es un libro sobre los estereotipos, sobre las imposiciones físicas, sobre los roles de género y sobre la necesidad de romperlos. Margarita apela a las niñas y les recuerda que ellas pueden hacer lo mismo que los niños, que ellas no han nacido para ser guapas y para gustar a los demás. Es un cuento además sobre la importancia de rebelarse, de romper con estas normas y de hacerlo en grupo: Margarita es la primera, pero después la acompañan sus amigas. Todas ellas dejan de comer flores y pierden su color rosa; comen hierba y se revuelcan en el barro como los elefantes, como ellos, porque no hay diferencia, porque lo que hacen ellos también lo pueden hacer ellas.
Frida de Jonah Winter y Ana Juan (BaoBab): En los últimos años, Frida Kahlo se ha convertido en algo más que en un referente feminista, sino en un icono explotado por la industria de la moda y la decoración. Encontramos su rostro en camisetas, bolsos, cojines… Pero ¿las más jóvenes saben quién es Frida Kahlo? ¿Saben la importancia que tuvo y que tiene su obra? ¿Saben las dificultades a las que se enfrentó y pese a las cuales siguió pintando? ¿Saben lo libre que fue? En este libro, Winter descubre a las lectoras más pequeñas la figura de Frida Kahlo; recorre su vida a modo de cuento, centrándose sobre todo en su pintura, en su pasión inquebrantable por la pintura: “Frida tiene un estilo propio. Nunca se ha visto obra igual. En los museos, la gente observa sus obras y llora, suspira y sonríe. Frida convierte su dolor en algo hermoso. Es como un milagro”. Frida Kahlo es un referente para todas las niñas que quieren pintar y que quieren crear, esas niñas que tienen un universo propio, distinto, un universo que, ojalá, algún día lleguen a mostrar como lo hico Kahlo a pesar de todas las dificultades.
Rosa Parks de María Isabel Sánchez Vegara (Alba Editorial): Un gesto, un simple pero enormemente reivindicativo hizo que todo comenzara a cambiar y que el silencio finalmente se rompiera. Fue ese gesto de no cederle el asiento a un hombre blanco el que hizo que Rosa Parks fuera detenida en un autobús de los Estados Unidos y el que desencadenó una movilización inaudita en un país en el que la segregación racial estaba tan arraigada que todavía hoy hay heridas y conflictos que no terminan de cerrarse. El gesto de Rosa Parks fue el de una mujer que se rebeló contra el racismo y la discriminación, de una mujer que desafío el poder y despertó conciencias, demostrando que la posibilidad de un cambio. Parks es un ejemplo para cualquiera, pero sobre todo para las mujeres. Ella no se calla, ella no acepta pasivamente, ella no se conforma ni renuncia, sino que alza la voz, protesta, molesta y se encara. Un nombre clave dentro del movimiento por los derechos humanos y del feminismo, un ejemplo para las niñas de hoy y para cualquiera; un referente ineludible cuya historia debe seguir contándose.
Más putas que las gallinas (y otras animaladas machistas) de Luis Amavisca y Sonia Pulido (Nube Ocho): El título no deja indiferente. Estamos delante de un libro para lectoras y lectores de más de treces años, de un libro en el que se deja constancia de qué manera el lenguaje ha sido el vehículo principal para cosificar a la mujer, para encerrarla en determinados patrones y roles y, sobre todo, para condenarla siempre y cuando ose salirse del esquema, romper con lo establecido, actuar más allá de los dictámenes, es decir, ser libre en todos los aspectos y decidir por sí misma. Desde “más putas que las gallinas” hasta “más salida que una gata en celo” pasando por “gorda como una foca”; este libro reúne toda una serie de expresiones denigrantes a través de las cuales se animaliza la mujer y, por tanto, se le niega cualquier valor humano, a la hora de condenarla por su imagen, por su comportamiento, por su actitud, por su manera de vivir e interactuar, por su sexualidad… La animalización de la mujer a través de estas frases es una forma más de cosificación y de borradura de la mujer, apartada y connotada. Un libro importante para observar que no hay lenguaje inocente y que las palabras tienen su peso; un libro para que los adolescentes asuman la responsabilidad hacia el lenguaje, para que sean conscientes tanto de lo que se les dice y de lo que dicen, para que aprendan que la primera y más recurrente violencia hacia la mujer nace y se reproduce a través del lenguaje.
Olga y la extraña criatura sin nombre de Elise Grevel (Blackie Books): Este es el primer libro de una serie de tres libros que tienen como protagonista a Olga, una niña que quiere ser zoóloga. “Me gusta observar cosas. Toda clase de cosas. Si eres rarito, o peculiar, tienes cara de tortuga, te observaré y tomaré notas. A lo mejor te estoy observando ahora mismo… Que no, que es broma. Tengo cosas más interesantes que hacer, la verdad. Por ejemplo, observar animales”. Este es el primer libro de una serie que ya cuenta con tres títulos y que tiene como protagonista a Olga, una niña curiosa e interesada sobre todo en los animales. Durante demasiado tiempo, se nos ha presentado las ciencias como un mundo de hombres; las ciencias y los números eran cosa de ellos, pero no es así. Los nombres propios de mujeres destacan por méritos propios, desde Marie Curie hasta Rita Levi Montalcini pasando por Rosalind Franklin o Barbara McClintock. Con su mirada curiosa hacia los animales, Olga nos recuerda a Jane Goodall y enseña a las niñas que ellas pueden ser cualquier cosa, que no hay oficios masculinos ni oficios femeninos, que no hay estudios para hombres ni estudios para mujeres.
La defensora de la humanidad. Eleanor Roosevelt de Anaïs Farner (Vegueta): Dice el tópico que detrás de un gran hombre hay siempre una gran mujer, pero Eleanor Roosvelt nunca estuvo detrás, siempre estuvo delante. En un mundo de hombres, Roosevelt se abrió camino, convirtiéndose en la principal promotora de la Declaración universal de los derechos humanos. Este libro no solo es importante porque presenta a los más jóvenes una figura que para ellos no solo resulta desconocida y lejana en el tiempo, sino también porque propone un modelo de mujer que se abre camino siguiendo sus principios. Consciente de su posición de privilegio, Roosevelt la utiliza para no solo defender sus ideas, sino también para abrir el paso a tantas otras mujeres que vinieron detrás.
Guapa de Canizales (Apila): Los libros de esta editorial son todos destacables por la belleza de su formato y la profundidad de sus textos. Guapa es un cuento para leer a los más pequeños antes de acostarse, un cuento ameno y que, sin embargo, cuestiona conceptos tan complejos como el de belleza o el de perfección. La protagonista de este cuento es una bruja que tiene una cita con un ogro; mientras acude a la cita, toda una serie de animales le dicen que no es lo guapa suficiente para quedar con el ogro y que tiene que cambiar su aspecto: la nariz, el mentón, el pelo, su figura encorvada… todos son defectos para estos animales, sin embargo, la bruja es guapa tal y como es, al ogro le gusta tal y como es y no cómo los animales dicen. Un breve cuento que enseña a las niñas a quererse tal y como son, a no dejarse llevar por las imposiciones estéticas, por los comentarios que dictan como debemos ser y como debe ser nuestro cuerpo. En el fondo, Guapa es un cuento sobre la aceptación de una misma y, por tanto, sobre el empoderamiento de una misma y del propio cuerpo.
Simone de Beauvoir de María Isabel Sánchez Vegara (Alba Editorial): La historia del feminismo no se entiende sin la figura de Simone de Beauvoir. El segundo sexo es un texto clave para la teoría y el movimiento feminista, pero la importancia de su autora trasciende su vida: sus artículos, su activismo, su modo de vivir… Simone de Beauvoir demostró que era no solo necesario sino posible repensar el papel de la mujer en la sociedad. Referente del compromiso social y político, referente del movimiento feminista y referente intelectual, este libro introduce a las lectoras más jóvenes en la vida de una de esas figuras centrales de nuestra historia cultural que no solo no han perdido vigencia, sino que siguen siendo un modelo en muchos aspectos.
Creativas de Cristina Serret (Shackleton Books): la historia ha estado escrito por ellos, en masculino. Los grandes nombres de las letras, del arte, de la ciencia, de la política… de casi todos los sectores son siempre nombres masculinos. Sin embargo, ellas siempre han estado ahí a pesar de que, muchas veces, sus nombres no aparecían en los manuales, sus obras no se daban a conocer y su voz era silenciada. Son muchas las niñas que han crecido sin referentes donde mirarse y, todavía hoy, son muchas las niñas que echan en falta esos referentes, esos modelos, de los que, por el contrario, sus compañeros siempre han gozado. Por esto este libro es tan recomendable, porque es un recorrido por el mundo del arte a través de las mujeres que más han destacado, mujeres que han hecho grandes cosas en pintura, en cine, en literatura… Mujeres cuyas obras son capitales y que, aunque muchas veces infravaloradas, han marcado en desarrollo de las artes, en cualquiera de sus expresiones. Este libro nos muestra a esas mujeres que pueden ser referentes para esas niñas que sueñan con escribir, con pintar, con crear y que, muchas veces, no encuentran un modelo que les recuerde que ellas pueden aspirar a todo, como lo han hecho siempre ellos.