La Inteligencia Artificial aplicada a las fotos sigue evolucionando de tal modo que cualquier persona ya tiene acceso a funciones que parecían impensables hace solo dos o tres años. Y ese es el caso de Deep Nostalgia, una web en la que es posible animar todo tipo de fotos, incluidas las antiguas.
El resultado es similar al que consiguen otras herramientas que ya se encuentran incluidas en algunos teléfonos, capaces de animar series de imágenes se que han tomado o alguna foto reciente. Sin embargo, en este caso el resultado es cuanto menos sorprendente, puesto que ver a nuestros antepasados moviéndose mínimamente con un aspecto que no recordamos sin duda sorprende.
¿Cómo lo hace posible?
No es extraño que Deep Nostalgia haya causado cierto revuelo, ya que pone al alcance de cualquier persona una tecnología sorprendente, apuntando solo lo que la IA hará posible hacer próximamente. No en vano, ya hay usuarios que son capaces de hacer deep fakes con el rostro de cualquier persona famosa.
En este caso, la compañía dueña de Deep Nostalgia se llama MyHeritage y utiliza la tecnología de animación de fotos de D-ID, una empresa que está especializada en la reconstrucción de vídeos empleando para ello el deep learning o aprendizaje profundo.
¿Qué hace Deep Nostalgia?
El proceso es tan simple como coger una foto antigua y cargarla en el lugar donde la web indica. En cuestión de segundos, será capaz de hacer un mini vídeo en el que la persona que aparece se moverá levemente, como si se tratara de una grabación antigua.
De este modo, es posible ver a antepasados girarse, mover sus ojos, sonreír y tener una vida que las fotos no son capaces de ofrecer, claro está. Eso sí, es probable que dé algo de impresión verlos vivir con sus rostros jóvenes y en blanco y negro.
¿Qué es necesario para utilizar la app?
Para acceder a este servicio, solo es necesario registrarse con un correo electrónico. También es posible hacerlo con una cuenta de Gmail o con una de Facebook. De inmediato estará disponible para ser utilizada. Eso sí, solo ofrece cinco imágenes gratuitas, ya que se trata de un producto de pago.
En la actualidad existe la posibilidad de utilizarla como prueba durante 14 días de modo gratuito. Después habrá que pagar unos 14 euros mensuales, aunque se quedan en el 50% si el pago es anual. Por supuesto, es posible darse de baja en cualquier momento, incluido en los días de prueba.
¿Qué se puede hacer con esa suscripción?
Según apunta la propia MyHeritage, el usuario puede utilizar la herramienta de un modo ilimitado, a lo que le añade la posibilidad de reparar fotos y de darles color con las otras herramientas de la compañía.
Por otra parte, es posible acceder a documentos históricos con más de 13.000 millones de registros que permiten encontrar otras coincidencias familiares para formar un árbol genealógico.
Solo función nostálgica
El propio nombre de la aplicación anuncia su intención, ya que quiere convertirse en toda una referencia de este tipo de contenidos, muy dados a ser compartidos en redes sociales. Eso sí, dejan muy claro que ni permiten la inclusión de voz ni buscan provocar confusión. Es decir, no quieren se que hagan deep fakes como el utilizado en el anuncio donde aparece una célebre artista española de florido apellido.
Asimismo, si las fotografías que se utilizan para hacer la animación no tienen una resolución adecuada o están algo borrosas, el resultado no será satisfactorio o directamente la aplicación avisará de que no puede llevar a cabo su tarea. Además, si hay más de un rostro en la imagen, solo podrá animarse uno de ellos, permaneciendo los demás tal cual.
¿Por qué esos gestos?
Otra de las preguntas que surgen es el porqué de ciertos movimientos, ya que puede ocurrir que la foto haga un leve gesto que nunca hiciera la persona que aparece en ella. En este caso, hay que tener en cuenta que se utilizan varios gestos modelo.
Por ello, el movimiento no es demasiado acusado, dado que podría llevar a tener esa sensación de que lo que se está viendo difiere mucho de la realidad. A fin de cuentas, la app solo es un intento de acercar a los antepasados a la actualidad y así imaginarlos en movimiento.