Una escapada de fin de semana es una oportunidad para desconectar y conectar con uno mismo y el patrimonio histórico de su cultura. Esto es especialmente así cuando vives en Cataluña y tienes planes a poco rato en coche que harán las delicias de los más curiosos en temas de historias y a quienes busquen sitios con encanto.
En lo alto de la sierra del Montsec, protegiendo el cauce del río Segre se eleva un pueblo medieval que sorprende a todo aquel que pasa. Con su majestuoso castillo milenario, visible desde lejos, este pueblo de Cataluña es un imán para todos aquellos amantes de una escapada diferente.
Montsonís es todo un tesoro medieval incrustado la provincia de Lleida. Cada calle respira historia, su fortaleza de más de 1.000 años, resguarda los secretos de un glorioso pasado y su gente y gastronomía directamente enamoran.
Un pueblo históricamente en guerra
El patrimonio de Montsonís está impregnado de acontecimientos históricos, desde batallas hasta la rebelión de la nobleza catalana contra el rey Juan II. La torre del homenaje, testigo de estas épicas luchas, aún se yergue como un monumento a la resistencia.
Y es que lo que más destaca de esta localidad es su castillo. Esta fortaleza tiene raíces profundas en la historia militar de la región. Construido como un enclave estratégico para defender las tierras recién conquistadas a los musulmanes, este castillo cambió de manos a lo largo de los años, manteniendo un vínculo constante con el mundo árabe.
Visita el interior del castillo
Adentrarse en el castillo es adentrarse en una cápsula del tiempo que transporta a los visitantes a la grandeza y elegancia de la Edad Media. Desde la impresionante fachada con ventanales góticos hasta la torre del homenaje, el castillo de Montsonís se presenta en excelente estado de conservación.
El recorrido guiado permite explorar cada rincón, todavía se puede ver el horno de pan y la prisión con sus cadenas de prisioneros intactas. Entre los espacios que revelan la riqueza de su historia se encuentran la bodega, la sala de armas, la sala de los escudos y la habitación destinada a los peregrinos, que permanece cerrada al exterior, como en épocas pasadas.
Visitas guiadas
Pero no todo es pasado e historia. Su presente reciente erige Montsonís como pionero en el turismo cultural. Su fortaleza fue el primer castillo privado de España en abrir sus puertas al público. Desde entonces, ofrece visitas guiadas que desentrañan todos sus secretos.
Los visitantes tienen la oportunidad de apreciar vistas impresionantes, descubrir el mítico pasadizo secreto que antaño permitía escapar en momentos de asedio y luego, al salir, pasear por las estrechas y encantadoras calles del pueblo.
Cómo se llega desde Barcelona y Girona
A menos de 50 kilómetros de Lleida, Montsonís es fácilmente accesible por carretera. Desde Lleida, se debe tomar la C-12 en dirección a Tàrrega/Barcelona y, en Vallfogona de Balaguer, desviarse por la C-26 hacia Áger/Tremp/Solsona/Andorra. Desde allí se siguen las indicaciones en Foradada, gira a la izquierda por la carretera LV-9137 y, en poco más de 20 kilómetros, habrás llegado a Montsonís.
Desde las otras capitales de Cataluña es una ruta más larga. Se ha de tomar la A-2 desde Barcelona y viaje casi dos horas. Desde Girona se llega por la C-25 en más de dos horas y cuarto. La mitad se tarda desde Tarragona, con un viaje casi en línea recta por la A-27 y la C-14.