Un avión de Vueling sobrevuela un banco de nubes
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El Cielo Único Europeo, un paso más hacia la descarbonización del sector aéreo
Vueling y Enaire forman un grupo de trabajo pionero en Europa para promover un espacio aéreo común
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La creciente actividad en el espacio aéreo mundial plantea importantes desafíos, lo que ha llevado a la industria de la aviación a trabajar e intensificar sus esfuerzos en la búsqueda de soluciones que permitan desarrollar prácticas más sostenibles y eficientes.
En Europa se presenta una gran oportunidad para optimizar la gestión de los cielos mediante la implementación de un sistema más eficaz. La solución pasa por reestructurar la navegación aérea y evolucionar hacia soluciones que permitan reducir la emisión de gases de efecto invernadero, así como mejorar la eficiencia operativa.
En este contexto, Vueling, junto con Enaire, el gestor español del tráfico aéreo, han creado un grupo de trabajo pionero en Europa para buscar fórmulas que mejoren las trayectorias de vuelo y, a su vez, reducir su impacto ambiental.
Imagen de las múltiples trayectorias del espacio aéreo / EP
Un cielo demasiado ‘troceado’
El Cielo Único Europeo surge como respuesta a la creciente necesidad de optimizar la gestión del espacio aéreo. Esta iniciativa de la Unión Europea tiene como meta armonizar el control del tráfico aéreo, creando un espacio aéreo común que impulse la eficiencia operativa, reduzca las emisiones y garantice una gestión más sostenible.
El desafío principal radica en la fragmentación del espacio aéreo, causada por la rigidez de las fronteras nacionales y la existencia de tramos reservados exclusivamente para uso militar. Esta división obliga a los aviones a desviarse de rutas directas, alargando trayectorias, incrementando el consumo de combustible y disminuyendo la eficiencia operativa. Además, el crecimiento exponencial de los vehículos no tripulados, como los drones, ha añadido nuevos desafíos a la gestión del tráfico aéreo.
Una gran oportunidad
A pesar de la complejidad del proyecto y los avances graduales, el Cielo Único Europeo representa una gran oportunidad. Su implementación busca simplificar la regulación del tráfico aéreo y modernizar su gestión. Esto permitirá disminuir significativamente las emisiones mediante trayectorias más directas y sostenibles.
El impacto del proyecto es clave: un espacio aéreo integrado, eficiente y que permite reducir el impacto en el entorno.
Un controlador sigue la evolución del espacio aéreo
SESAR: el corazón tecnológico del Cielo Único Europeo
A través del programa SESAR (Single European Sky ATM Research), que canaliza las propuestas de I+D+i dentro del proyecto del Cielo Único Europeo, se busca alcanzar objetivos comunes sin depender exclusivamente de acuerdos internacionales, adoptando un enfoque centrado en soluciones tecnológicas innovadoras. Esto se logra mediante una mayor coordinación y comunicación entre aerolíneas, proveedores del espacio aéreo, Eurocontrol e incluso las autoridades militares.
Mediante la incorporación de estas tecnologías avanzadas, SESAR trabaja para superar los obstáculos históricos del espacio aéreo europeo, como las rutas zigzagueantes de los aviones, diseñadas originalmente en torno a radiofaros fijos, o la exclusión de zonas militares que actualmente no pueden ser sobrevoladas. El objetivo es optimizar las trayectorias de vuelo, permitiendo así reducir el uso de combustible, lo que se traduce en una reducción de emisiones de CO2.
Por un espacio aéreo limpio
En este escenario, Vueling y el gestor español de tráfico aéreo, Enaire, lideran un grupo pionero en Europa que establece un estándar para medir la eficiencia de las rutas actuales y su impacto ambiental. Este enfoque innovador no solo permitirá ahorrar combustible y reducir las emisiones, sino también promover un cambio significativo en la planificación de rutas aéreas.
En concreto, se estima que el programa podría reducir las emisiones de carbono en un 10%, lo que equivale a un ahorro de 18 millones de toneladas de combustible al año, similar a evitar diez viajes diarios entre la Tierra y la Luna. Además, al integrar mejor el espacio aéreo europeo, el proyecto promete mejorar la puntualidad y mantener altos estándares de seguridad, entre otros beneficios.
Como resultado de este esfuerzo, Vueling ha recibido el Premio de Foment del Treball al Desarrollo Sostenible, un galardón que reconoce iniciativas innovadoras capaces de mejorar significativamente el impacto ambiental mediante el uso de tecnologías ecoeficientes. Este premio reafirma el compromiso de la aerolínea con la sostenibilidad y destaca su apuesta por la implementación de rutas más eficientes, marcando un ejemplo a seguir en el sector de la aviación.
El futuro del Cielo Único Europeo
Con SESAR como motor tecnológico, el Cielo Único Europeo se posiciona como una iniciativa fundamental para transformar la industria aérea. Su enfoque en innovación, sostenibilidad y colaboración entre todos los actores del sector trabaja para ofrecer avances significativos en la gestión del espacio aéreo, haciéndolo más eficiente y respetuoso con el medio ambiente.
Estos esfuerzos podrían traducirse en avances notables en menos de cinco años, lo que representaría un beneficio mutuo para todas las partes involucradas. Sin embargo, todavía queda un importante camino por recorrer para conseguir un espacio aéreo europeo plenamente integrado.
