La importancia de incluir frutas en nuestra dieta diaria es fundamental para mantener una alimentación equilibrada y promover una buena salud. Las frutas son una fuente natural de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, las cuales desempeñan un papel crucial en el funcionamiento adecuado de nuestro cuerpo. 

Comer una gran variedad de frutas todos los días puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, prevenir enfermedades crónicas y promover un estilo de vida saludable y activo. 

¡A la rica cereza!

Una de las frutas que no puede faltar en nuestra casa es la cereza. Es el único fruto de hueso no climatérico, es decir, que si se recolecta antes de tiempo no madura fuera del árbol. Por lo tanto, se debe cosechar en el momento oportuno. Las cerezas maduran desde finales de primavera hasta principios de verano, siendo un periodo muy corto de recolección, en comparación con otros árboles frutales.

Cerezas iStock

Los principales huertos comerciales de cerezos en Europa se encuentran en Turquía, Italia, España y otras regiones mediterráneas, y en menor medida en los Estados Bálticos y en el sur de Escandinavia.

Cabe destacar la floración de la cereza en el Valle del Jerte, un fenómeno natural de una belleza extraordinaria que atrae la atención de visitantes y fotógrafos de todo el mundo. Durante el periodo de floración, que suele ocurrir entre los meses de marzo y abril, los campos del valle se cubren de un manto blanco y rosa, creando un paisaje espectacular.

Cerezo en flor del Valle del Jerte Valle del Jerte

Las vitaminas de la cereza

La cereza tiene múltiples cualidades, algunas de ellas son las siguientes:

Alto contenido de antioxidantes y fitonutrientes que pueden ayudar a reducir la inflamación y proteger las células de los daños de los radicales libres.

- Regula el sueño: son fuente natural de melatonina, una hormona producida por la glándula pineal y la responsable de regular los ciclos del sueño.

- Ayuda en la recuperación muscular y a la salud dental: el consumo de jugo de cereza agria puede ayudar a reducir el dolor muscular y acelerar la recuperación después de un entrenamiento intenso. Y ayuda a la prevención de caries.

Persona comiendo cerezas iStock

- Beneficia a la salud del corazón: las cerezas tienen fibra, vitamina C y potasio.

- Ayuda a controlar el peso: son bajas en calorías y ricas en fibra, lo que ayuda a promover la saciedad y reducir el hambre.

- Elimina las toxinas: el consumo ayuda a eliminar las sustancias tóxicas que se almacenan en alguno de nuestros órganos como el hígado y la vesícula biliar.

Sin embargo, hay algunas cosas que se han de tener en cuenta sobre la ingesta de cerezas:

- Tienen escasas vitaminas: No debemos utilizarlas como sustituto de otros alimentos que son más ricos en valor nutricional o vitamínico.

- El consumo excesivo nos puede provocar problemas gastrointestinales como gases intestinales, hinchazón y calambres, ya que contiene fibra dietética.

 

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