Sandra Guaita, alcaldesa de Reus, al recibir la vara de mando
El Ayuntamiento de Reus ha negado por activa y por pasiva que haya existido mala praxis en FuneCamp, el operador funerario público que pretende cubrir buena parte de Tarragona.
La Administración local ha realizado tres investigaciones internas, sin hallar indicios de vandalismo.
Pero ahora, dos nuevas fotografías abonan la tesis de que algo pudo pasar en la empresa de final de vida que costean cuatro ayuntamientos. Ya no vale decir que es un invento de "la extrema derecha", como aduce una concejal del gobierno de Sandra Guaita: hay que investigar a fondo y, si ocurrió, depurar responsabilidades.