Ramón Lamiel, director del Servei Català de Trànsit
Más muertos que hace un año, pero menos que en 2019, fecha de referencia para el control de la evolución de las víctimas de tráfico.
Julio termina con una de cal y otra de arena en las carreteras catalanas, porque es cierto que los accidentes han dejado menos heridos de gravedad que en el mismo periodo del 2024, pero han aumentado los fallecidos, para los que no hay vuelta atrás.
Resulta evidente que las medidas del Servei Català de Trànsit, que dirige Ramon Lamiel, así como la concienciación, la mayor seguridad de los vehículos y la reforma de las leyes dan sus frutos, pero a menor ritmo del deseado.
Tampoco parece que la campaña veraniega de Trànsit esté llegando a la sociedad, pues en apenas dos semanas han muerto ocho personas en el asfalto. Por lo tanto, los problemas parecen detectados, pero las soluciones y, sobre todo, los resultados van con una marcha menos.
