Lluís Llach, presidente de la ANC, durante la presentación de la Diada 2024

Lluís Llach, presidente de la ANC, durante la presentación de la Diada 2024 ANC

Examen a los protagonistas

Lluís Llach

Presidente de la ANC

4 agosto, 2024 23:46

El movimiento independentista catalán ha perdido peso específico; ya no moviliza ni masas ni sentimientos como pudo ocurrir en 2017. El presidente de la ANC, Lluís Llach, ha vuelto a mostrar un rostro sometido a Junts, tras desvincularse de la protesta que los CDR iban a organizar delante de la Estación de Francia de Barcelona este lunes 5 de agosto. 

Además, la asociación separatista (y también, una suerte de altavoz del expresident prófugo Carles Puigdemont) atraviesa una sangría de afiliados y se ha visto relegada a la irrelevancia política.

La ANC quiere hacer de escudera de la pataleta del expresidente de la Generalitat con su detención, pero sólo consiguen dar bandazos sin que trasluzca ninguna preocupación por Cataluña y el bienestar material de los ciudadanos. 

Su momento de gloria ya les pasó. Llamaron a la militancia de ERC a tumbar el acuerdo de investidura de Salvador Illa y, aunque por la mínima, los síes salieron de las bases para mostrarse de acuerdo con el pacto. Intentaron protestar para que amnistiasen a Puigdemont y sólo movilizaron a 1.500 personas.

La escena se completa cuando el sondeo del CEO arrojó que sólo el 40% de los catalanes estaban de acuerdo con la secesión, el porcentaje más bajo desde junio del 2015. La demoscopia muestra que el tiempo de la ANC ya pasó, pero ellos siguen erre que erre.