El consejero delegado de Endesa, José Bogas / ENDESA
José Bogas
La Endesa de José Bogas se enfrenta a un nuevo lío. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) investiga a la compañía por posibles prácticas anticompetitivas en todos los territorios donde opera. Por el momento, ha iniciado un expediente sancionador contra varias empresas del grupo.
La investigación se centra en el presunto trato "discriminatorio y preferente" que la energética habría dado a la resolución de solicitudes, reclamaciones e incidencias de sus propias filiales, en detrimento de terceras empresas competidoras. Prácticas que habría cometido en ámbitos como la comercialización de energía eléctrica, la instalación de equipos y la prestación de servicios, así como la instalación y operación del autoconsumo.
Endesa lo niega todo, se defiende y, si bien es cierto que la CNMC deberá demostrar el abuso de dominio de Endesa, también lo es que, si lo demuestra, dejará en mal lugar a la empresa. Por ahora, la simple sombra de la duda ya deja a la compañía en una situación comprometida en términos reputacionales.
