Tomàs Roy
La Agencia de Ciberseguridad de Cataluña ha admitido que los hospitales catalanes reciben un intento de hackeo cada ocho horas. Es un dato estremecedor que invita a la reflexión, máxime sabiendo que ha habido precedentes preocupantes, como el asalto a los archivos privados del Hospital Clínic de Barcelona, o casos más recientes como una intrusión en el software del Hospital de Berga.
Ante ello, el ente autonómico debe esmerarse y hacer una labor preventiva. No puede ser que los pacientes catalanes queden a merced de los ciberpiratas, como ha pasado en otras ocasiones, exponiéndose a la difusión fraudulenta de datos.
Para ello, la estructura de la Generalitat cuenta con un experimentado profesional: Tomàs Roy, con más de dos décadas de experiencia en el sector. Es positivo que la Agencia trasmita cuántos casos de ciberataque registra, pero lo sería más si tiene una estrategia efectiva de prevención, además de una respuesta.