@cronicaglobal
Grifols intenta dejar atrás los momentos más duros de la pandemia guiada por su nuevo presidente ejecutivo, Thomas Glanzmann. Los últimos movimientos de la compañía, soltando lastre en su negocio chino, han convencido a los inversores.
Pero la reducción de la deuda y la garantía de abastecimiento de plasma siguen lastrando la farmacéutica. A la multinacional de hemoderivados le queda mucho camino por recorrer.