Ada Colau quiere aferrarse al gobierno municipal con un mandato tripartito tras ocho años de renuncias a grandes proyectos. La líder de los comunes no ha actuado como la alcaldesa de todos, sino que ha antepuesto la ideología a los intereses de Barcelona.
Que durante este tiempo se hayan perdido iniciativas como el Hermitage, la ampliación del aeropuerto o la sede de la Agencia Europea del Medicamento tiene mucho que ver con las trabas impuestas por la primera edil.