El anuncio estrella del consejero de Empresa y Trabajo de la Generalitat de Cataluña a las puertas del Mobile World Congress (MWC) ha sido... la catalanización de la feria de telefonía. Roger Torrent se reunió ayer con el director general de GSMA, John Hoffman, para sellar un acuerdo que impulse la lengua catalana en el marco del congreso. Por supuesto, no se dijo ni una palabra sobre el castellano, idioma cooficial en la autonomía y, de hecho, mayoritario entre los hablantes de la región.

Siempre es bueno llegar a acuerdos. Pero con todos los frentes abiertos que tiene la industria tecnológica, la obsesión monolingüe de la Generalitat debería ser la última preocupación.