Alizzz
El 'Neng' de 'Castefa'
Nuevo conato de polémica lingüística, esta vez procedente del mundo de la música pop: Cristian Quirante Catalán, en arte Alizzz, se queja de que no se le considere parte de la cultura catalana por cantar en castellano y reivindica su catalanidad, que empieza incluso en su segundo apellido. Hasta ahora, este tipo de broncas absurdas solían proceder del mundo de la literatura, donde nuestros nacionalistas les negaban la catalanidad a Juan Marsé o los hermanos Goytisolo por escribir en español. La principal diferencia con el caso que nos ocupa es que a los interfectos se la pelaba que los lazis les consideraran o no parte de la cultura catalana. En mi modesta opinión, el señor Quirante debería adoptar la misma actitud displicente, pues tanta insistencia en su catalanidad solo sirve para que Lluís Llach lo ponga en su sitio, como así ha sido, al decirle que si quiere formar parte de la cultura catalana debería cantar en catalán.
Hace tiempo que el lazismo reparte carnés de catalán, por lo que lo más adecuado, en mi opinión, es no solicitarlo. A lo sumo, como muestra de generosidad, se le puede hacer el favor a quien escribe o canta en catalán de considerarlo parte de la cultura española o hispana, ya que el catalán es una lengua española porque Cataluña forma parte de España desde tiempo inmemorial y no es esa colonia a lo Gibraltar que los procesistas se empeñan en ver. Como músico, ¿qué interés puede tener Alizzz en compartir cultura con un plomo como Lluís Llach? El llorón de Verges, además, es una vieja gloria metida en política que está para el tinte, mientras que Alizzz (Castelldefels, 1984) está en la cresta de la ola con su ultimo hit ¿Qué pasa, nen? (¿posible homenaje a aquel Neng de Castefa que se inventó Edu Soto hace años?), lo peta en directo y ha escrito canciones para C. Tangana y Rosalía, además de colaborar con cantantes como Lola Índigo, Amaia o Aitana, a las que tampoco les va nada mal. Alizzz puede sentirse todo lo catalán que quiera y tendrá razón al hacerlo, pero nunca convencerá a gente como Llach de que es todo lo catalán que exige el lazismo. Eso solo lo ha logrado Rosalía gracias a su éxito global, pero en este caso, son los indepes los que van a remolque de la artista, definida siempre en TV3 y El Nacional como “la catalana Rosalía”. Si no te pueden sacar nada que les convenga, los lazis pasan de ti, y yo diría que hay que empezar a considerar el trato que te dispensan como un privilegio: el señor Quirante, al igual que yo, puede considerarse catalán, pero es absurdo esperar que los guardianes de las esencias nos consideren de los suyos (es más, yo me preocuparía si así fuera y me preguntaría qué he hecho mal para no haber logrado quitármelos de encima).
Evidentemente, Lluís Llach la caga al repartir carnés de catalán, pero creo que Alizzz tampoco se luce mucho al reivindicar una evidencia, como es que un tío de Castefa es tan catalán como uno de Berga. Si Llach no lo quiere ver, allá él, pero con lo bien que le van las cosas al señor Quirante, yo, en su lugar, no me preocuparía porque los lazis no me consideren uno de los suyos: en cualquier circunstancia de la vida, es fundamental alejarse de las malas compañías.