Teresa Ribera
El plan de ahorro energético del Gobierno ya recoge sus primeros frutos. En la segunda semana de agosto, las medidas aplicadas en locales públicos y privados redujeron el consumo de electricidad un 3,7%. Se trata de un avance, aunque muy insuficiente. De hecho, la demanda eléctrica cayó un 7% durante los tres primeros días, pero luego se recuperó casi tan rápidamente como bajó. Hará falta más ambición si se quiere ahorrar energía en serio ante un posible corte del gas ruso.