Pere Aragonès
Prometer la gratuidad de las guarderías y luego votar en contra de esa medida en el Parlament es, cuando menos, sorprendente. Pere Aragonès convirtió esa universalización de la educación de 0 a 3 años en uno de los proyectos estrella de su mandato. Pero su rechazo a secundar iniciativas en este sentido hace temer incumplimientos y supone un nuevo feo a los ayuntamientos, que tuvieron que asumir costes millonarios tras el tijeretazo de Artur Mas.