La Generalitat ha levantado este martes las limitaciones a la movilidad y a las reuniones que estaban vigentes en Cataluña para combatir la pandemia de Covid, aunque mantiene las restricciones al ocio nocturno. Casualmente (o no), la decisión entrará en vigor este viernes, justo un día antes de la Diada, para la que hay previstas las tradicionales manifestaciones independentistas que se habrían visto afectadas por la normativa actual.
No parece muy razonable facilitar las concentraciones masivas del 11S --aunque probablemente menores que hace unos años-- mientras siguen las trabas para los bares y discotecas. Es un nuevo patinazo del Govern de Pere Aragonès.