Declarar la cultura como bien esencial, para luego excluir las librerías de la lista de actividades esenciales, es otro de los grandes sinsentidos del Govern. Así se lo ha hecho ver la Cambra del Llibre en Catalunya, integrada por los gremios de editores, libreros, distribuidores y de la comunicación gràfica, tras conocer que las librerias no podrán abrir durante los fines de semana por las nuevas restricciones antiCovid.

Presidida por Patrici Tixis, la Cambra exige coherencia a la Generalitat.