Alba Vergés
Entra dentro de la lógica que la Consejería de Salud de la Generalitat, encabezada por Alba Vergés, abra un expediente al Arzobispado de Barcelona por la misa de beatificación que congregó a unas 600 personas en el templo de la Sagrada Familia el pasado sábado en plena pandemia de coronavirus. Pero, aún en el caso de que se cumplieran las restricciones sanitarias, resulta incomprensible que el acto contara con la autorización del servicio de Protección Civil del Govern independentista. Anunciar una investigación y llevarse las manos a la cabeza a posteriori es llegar demasiado tarde.