Miquel Valls, en una imagen de archivo de cuando era presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona / CG
La Cámara de Comercio de Barcelona y la de España reconocen por fin a Miquel Valls
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Han tenido que pasar cinco años y un relevo en la presidencia de la Cámara de Comercio de Barcelona para que las instituciones camerales brinden un homenaje al presidente histórico de la primera, Miquel Valls i Maseda. El empresario falleció en septiembre de 2019 a los 76 años de edad tras una larga enfermedad. En ese momento los independentistas de la ANC acababan de aterrizar en la institución de dinamización de economía local y aparcaron los festejos a una figura que había dado forma a lo que era en ese momento la organización. Se limitaron a emitir un comunicado.
Ahora, con Josep Santacreu al frente de la Cámara, se recordará finalmente su figura. El acto tendrá lugar el próximo viernes en la Casa Llotja de Mar y estará coorganizado por la institución económica local y la Cámara de España, liderada por José Luis Bonet, uno de los empresarios que durante años tejió complicidades con Valls, especialmente durante su etapa al frente del consejo de administración de Fira de Barcelona.
José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, en un desayuno de CEDE
Además de ellos dos, el homenaje contará con las intervenciones del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu; el presidente de la Cámara de Comercio de Valencia y del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, José Vicente Morata; y el teniente de alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Valls. Todos ellos conocieron a Valls en vida.
Además de la familia de Valls, estarán presentes en la Casa Llotja de Mar el presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat; el de Turismo de Barcelona, Joan Clos; la alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín; y el grueso de los representantes camerales actuales y pasados que trabajaron con el histórico presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona.
El acto de reconocimiento brindado desde la sociedad catalana y desde el resto del país que el empresario se merecía. Llega tarde, pero finalmente ha llegado.
