Fermí Puig cierra, ¿qué inversores apoyan al chef?

Fermí Puig ha anunciado esta semana que baja la persiana del restaurante que lleva su nombre en la calle Balmes. El chef avanzó en El Matí de Rac1, el programa que dirige Jordi Basté y que es el líder indiscutible de la radio en Cataluña, su decisión de jubilarse a finales de mes tras 11 años al frente de su establecimiento homónimo.

Ha sobrevivido a momentos duros, como la crisis del Covid, con una apuesta por la cocina más tradicional catalana sin aspavientos y con un precio correcto. Mucho más accesibles que cuando estaba al frente del Drolma en el Hotel Majestic, el momento más alto de su carrera que le propició el reconocimiento de la guía Michelín.

Restaurante Fermí Puig RESTAURANTE FERMÍ PUIG

También fue de los más exigentes y, tal y como recuerdan sus clientes habituales, en la calle Balmes se había acomodado y eso se notaba en la carta. Puig es bueno en los fogones, se le reconoce como uno de los mejores cocineros que ha tenido Cataluña en los últimos tiempos, pero renunció a innovar.

Su restaurante cerrará la persiana y, con él, terminarán la aventura empresarial en el sector de la restauración los inversores que le habían acompañado. El propio Basté, con un apoyo que iba más allá de una simple aportación económica, además del exdirector de La Vanguardia, Màrius Carol, y el empresario audiovisual Jaume Roures. Habituales todos ellos del salón y el reservado de la calle Balmes, un establecimiento que continuará recibiendo a comensales hasta finales de mes.