El Gobierno de Terrassa patina con su pista de hielo para Navidad
El líder de ERC en Terrassa (Barcelona), Isaac Albert, tiene las cosas claras, cosa nada menor en política. El pasado 16 de septiembre aprobó la licitación pública para instalar una pista de hielo en Navidad en la ciudad, como hace cada año, con un presupuesto de más de 56.000 euros.
Hasta aquí, todo bien. Pero este mismo domingo el concurso público se empezó a torcer. El concejal que está en el Gobierno de Jordi Ballart se enteró que en la población se estaba gestando una plataforma contraria a la instalación, así que decidió lanzar un mensaje en redes sociales capital. “Ahora no toca”, aseguró al estilo Jordi Pujol, “genera contradicciones”.
El alcalde Ballart se ha quedado mudo y ha dado alas a la polémica local. Se carga contra el líder republicano por autoenmendarse y tomar una decisión electoralista, ya que la licitación del espacio navideño estaba avanzada. Además, se recuerda que ha sido él mismo quién la ha activado.
El PSC ya aseguró el año pasado que las emisiones de CO2 de la pista equivalen a dar la vuelta al mundo en coche siete veces y media y calificó la política medioambientalista del consistorio de ser poco más de un eslogan. Estas declaraciones fueron pasto de la polémica. Por segundo año consecutivo, los planes navideños de la localidad levantan polvareda.