La guerra sucia de Valtònyc y Puigdemont
Lleva días corriendo por las redes. Jordi Pesarrodona, el concejal payaso de Sant Joan de Vilatorrada lo dejó ir en una entrevista en Vilaweb: “El tsunami es una gran trampa”. A partir de aquí, hace una semana, las redes hervían. ¿Por qué tsunami ha desaparecido? ¿ Por qué ninguno de sus líderes ha sido identificado y procesado?
La respuesta se intuía hasta que ayer, Josep Valtònyc, el apadrinado, y vecino, de Carles Puigdemont en Waterloo lanzó el dardo: “Si no ha habido represalias por el Tsunami Democràtic es porque los que están detrás son los mismos que han ayudado a estabilizar el régimen con pactos de mierda inútiles que solo han servido para desactivar las calles y enfrentar independentistas por intereses de partido”. Ahí es nada. Tsunami fue un invento de ERC para vaciar la calle, y se supone que en pago a sus pactos ninguno de los activistas ha sido acusado. En esta teoría conspiranoica, se intuye que seguramente el Ministerio del Interior también tiene algo que ver.
Si no hi ha hagut represàlies pel Tsunami Democràtic és perquè qui hi havia darrera són els mateixos que han ajudat a estabilitzar el règim amb pactes de merda inútils que només han servit per desactivar els carrers i
— JOSEP VALTÒNYC ?️ (@valtonyc) June 6, 2020
enfrontar als independentistes per interessos de partit.
Vàltonyc es la voz de Puigdemont, forma parte de su círculo íntimo. Las elecciones no están convocadas pero hace falta animar el cotarro activando una campaña contra ERC. En el hilo del tuit de Valtònic se señala directamente a Oriol Junqueras y Pere Aragonés como los supuestos urdidores de la estrategia, eso sí, sin apuntar ni una sólo prueba, en el “todo vale” que se desatará en estos meses de intenso clima preelectoral. Lo que se viene en llamar “guerra sucia” con todo tipo de fake news.