José Bové, el "integrista" verde que defiende el 'procés'
José Bové, icono del ecologismo europeo, será entrevistado este sábado en el programa de TV3 Preguntes Freqüents para saber cómo se ve el procés independentista desde el extranjero.
Más allá de la cuestión nacionalista, sería todo un ejercicio de periodismo preguntarle por sus múltiples polémicas en Francia. A pesar de declararse partidario de la no violencia, en sus años de sindicalista fue uno de los principales organizadores del volcado de camiones de fruta y verdura española en la frontera de Perpignan. También tuvo problemas con la justicia por coger una excavadora y destrozar un McDonald’s como gesto contra el imperialismo americano. Y unos años más tarde fue procesado y condenado por destrozar campos experimentales de transgénicos.
Sin derecho a tener hijos
Una de sus declaraciones más controvertidas fue su rechazo público a una proposición de ley para la reproducción asistida de parejas homosexuales. Bové alegó que era contraria a los valores del ecologismo: "Estoy en contra de cualquier manipulación de los seres vivos, ya sea por parte de las parejas homosexuales o de las parejas heterosexuales. Creo que el derecho a la vida y el derecho a tener un hijo son dos cosas diferentes. No creo que tener un niño sea un derecho. Voy a estar lleno de enemigos".
El activista francés sigue manteniendo estas posiciones y, siguiendo con su estrategia habitual, ha denunciado la acción de los lobbies LGTBI para incorporar sus "demandas" a los programas de los partidos políticos.
El bioquímico J.J. Mulet lo tildó de "integrista vestido de verde", por su cercanía a los postulados más reaccionarios de la derecha conservadora. Eso sí, en el nombre del medio ambiente.