Fomentar la bici
El Ayuntamiento de Barcelona no para en su empeño de fomentar el uso de las bicicletas. Lo hace porque es un buen sistema de descongestión del tráfico y, sobre todo, porque es la “mejor idea del mundo”, como decía su campaña guay.
En las últimas semanas se gasta el dinero para generar nuevos carriles con isletas en los cruces del centro, donde los técnicos también instalan aparcamientos y semáforos. En algunas confluencias, como la que aparece en la fotografía de Consell de Cent y Sardenya, se han instalado tres nuevos semáforos; uno doble más allá del paso de peatones dirigido a los ciclistas que bajan y a los que van en dirección sur; otro más cercano al lado mar del cruce solo para los que bajan; y un tercero en el lado Castelldefels.
Debe ser que los especialistas municipales piensan que las bicicletas que se saltan las señales en rojo lo hacen porque no las ven. ¿Será posible?