La nueva oportunidad de Messi para liderar un Barça ganador

Leo Messi está tocado. Lleva un mes exacto secuestrado en el Barça. Hace justo 30 días, el argentino comunicó al club culé, mediante un burofax, su intención de dejar el equipo de su vida y romper su contrato de forma unilateral. Sin embargo, Josep María Bartomeu no le facilitó su salida, y le obligó a continuar si no quería pasar por los tribunales. 

Finalmente, el 10 cedió y optó por continuar, como mínimo, un año más en el Camp Nou. Y luego ya se verá. Con una revolución en la plantilla y en el palco, todo puede pasar el verano que viene. Sin embargo, es evidente, y más viendo su cara en los partidos de pretemporada y entrenamientos, que en estos momentos, Leo no tiene la cabeza en el Barça. 

Leo Messi en un partido del Barcelona / EFE

Leo Messi en un partido del Barcelona / EFE

Se siente traicionado. Y ahora también solo, tras la marcha forzada de sus grandes pilares en el vestuario: Luis Suárez y Arturo Vidal. Son precisamente las formas y el desprecio a sus dos grandes allegados lo que llevaron al rosarino a apuntar de nuevo públicamente a la directiva. 

Ante una oportunidad de oro

En este contexto, debe tener un papel esencial Ronald Koeman. Debe ser el responsable de hacerle ver que el equipo se ha reforzado con jugadores jóvenes con gran potencial. Desprenderse de algunos pesos pesados era necesario para equilibrar las cuentas, y abrir las puertas a una auténtica revolución en todos los sentidos. 

Leo Messi se encuentra ante su gran oportunidad de demostrar liderazgo y actuar de capitán. Sin amigos en el vestuario, solo debe centrarse ya en buscar lo mejor para el equipo, y para ganar. En menos de dos días empieza de nuevo la competición oficial. Una de las Ligas con más incógnitas de los últimos años en el Barça. Pero el nexo común sigue siendo Messi. 

Leo Messi durante un partido con el FC Barcelona /FCB

Leo Messi durante un partido con el FC Barcelona /FCB

En el FC Barcelona siempre se han sentido invencibles con el 10 en sus filas. Y Leo debe intentar sobreponerse a los últimos acontecimientos, y obviar los ataques a una directiva y a un Bartomeu que le queda cada vez menos tiempo en su trono. Debe centrarse en triunfar, porque no puede tampoco desperdiciar una temporada en sus últimos años de carrera. 

Sin exigencias sentimentales; con un nuevo entrenador dispuesto a hacer todo lo necesario para ganar; con futbolistas jóvenes con ganas de comerse el mundo y vacas sagradas ante su última oportunidad de hacer algo grande; Leo Messi tiene todos los ingredientes para llevar al Barça de nuevo a la gloria. Si lo consigue, hará olvidar a todo el barcelonismo su intento de huida. E incluso quizá consigue autoconvencerse de que lo mejor para su vida, es colgar las botas en el Camp Nou. Todo depende de él.