Koeman: "No somos máquinas, somos humanos"

Ronald Koeman regresó al escenario en que más cómodo parece sentirse, la sala de prensa, con rostro de pocos amigos pese a la victoria holgada contra el Elche (3-0). El entrenador tenía motivos para estar satisfecho tras un partido que fue infumable en el primer tiempo, pero que terminó sorprendentemente bien. Pidió reacción a sus jugadores y se la dieron. 

En la rueda de prensa previa al partido ya mandó un mensaje claro a las vacas sagradas. Pidió un paso al frente a los jugadores más veteranos para tomar el timón de una nave, la blaugrana, que últimamente va demasiado a la deriva. Pese a su rostro serio tras el encuentro, seguramente fruto de la procesión que lleva por dentro, el técnico holandés se mostró complacido por el resultado y defendió a sus jugadores. 

"En la primera parte estuvimos flojos. Al descanso estaba descontento por nuestro ritmo de partido. Nuestro juego con balón ha sido un poco lento. La defensa dejaba muchos espacios para correr, el equipo no estaba muy junto. Hemos mejorado en la segunda mitad, ritmo de balón, profundidad... y hemos marcado tres goles. Mucho mejor", explicó Koeman a modo de resumen del encuentro. 

Mejorando el estado de ánimo 

Sin embargo, la imagen de la primera mitad fue tan nefasta que la mayoría de periodistas le preguntaron por cuestiones como la actitud, la intensidad o, incluso, el alma del equipo. Y Koeman reconoció algunas cosas, pero defendió a sus pupilos, como acostumbra en los últimos meses: "Para mí, la actitud ha sido buena. Que falte ritmo en el juego no tiene por qué ser un problema de actitud. A veces el contrario también ayuda a que no te salgan las cosas como quieres. No somos máquinas, somos humanos y el equipo ha demostrado personalidad". 

Messi celebra un gol contra el Elche / EFE

Messi celebra uno de sus dos goles contra el Elche / EFE

"Seguramente por ganar hoy, mañana el estado de ánimo será diferente. Es normal cuando dejas dos puntos en Cádiz en un momento clave para cortar distancias con los de arriba", expuso el entrenador azulgrana sobre los ánimos de la plantilla. 

Messi, Pjanic y Griezmann

Prgeuntado sobre nombres propios, sonaron especialmente tres jugadores: Leo Messi, Pjanic y Griezmann. Sobre el astro argentino no tiene dudas y lo quitó en seguida de la terna de jugadores a los que pide más: "Cuando hablo de los mayores no me refiero a Leo, porque su efectividad es todavía impresionante. Son otros de los mayores los que tienen que marcar diferencias". 

En cuanto al medio serbio, Koeman dio una de cal y una de arena: "Tiene que mejorar en ritmo de balón, en posición, pero a veces parece que si cambias a un jugador es el culpable y no es así. Hemos puesto a Dembelé para abrir el campo y tener más profundidad, y por eso el cambio". 

Por último, habló sobre Griezmann, al que quiso dar descanso: "No hay que olvidarse de que jugamos muchísimos partidos y también puede haber cansancio en algunos jugadores, por eso hemos hecho cambios, buscando tener más frescura en el equipo. Sobre todo Antoine tenía que descansar, porque venía jugando mucho".