Dani Rodríguez controla el balón ante el Torrent con el Barça B FCB
El Barça B remonta un partido muy loco tras encajar tres goles en los primeros 20 minutos
El equipo de Belletti, horroroso en la primera parte, marcó cuatro tantos tras el descanso y mereció ganar al Atlético Baleares
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Veinte minutos horribles parecían condenar al Barça B en Mallorca. Tras una primera parte horrorosa en la que encajó tres goles que destaparon todas sus carencias, el equipo de Belletti se transformó en una máquina de jugar al fútbol y empató un partido muy loco (4-4) con dos goles finales de Dani Rodríguez y Aziz. De la apatía se pasó al vértigo en un filial azulgrana que sigue en la lucha por el ascenso a la Primera RFEF.
El partido no pudo empezar peor para el Barça B, debilitado por las bajas. A los 48 segundos, una entrada de Cortés a Jaume Tovar fue sancionada como penalti, transformado por Moha Keita, que engañó a Kochen.
El error de Kochen
El Barça B encajó mal el golpe. El gol, en cambio, animó al Atlético Baleares, mucho más intenso y las ideas más claras que el filial azulgrana. A los nueve minutos, la escasa intensidad defensiva castigó de nuevo al equipo de Belletti, que encajó el segundo gol.
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No había tocado fondo el Barça B. Tampoco, Kochen, un portero que poco a poco parece apagarse como futura estrella. Antes del minuto 20, un error del futbolista estadounidense penalizó de nuevo al Barça y Jaume Tovar marcó el tercer gol balear.
Impotencia barcelonista
El Barça, sin ideas ni chispa, no tuvo la primera ocasión hasta el minuto 31, cuando Pablo detuvo un remate de Dani Rodríguez. Con algunos destellos del filial, y poco más, se llegaría al descanso.
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Belletti intervino en el descanso y el Barça B cambió por completo en el segundo tiempo. El equipo se sacudió todos los complejos y desde el primer minuto imprimió un ritmo mucho más alto al juego. Dani Rodríguez y Juan Hernández marcaron en los primeros 20 minutos y metieron al filial en el partido.
El Atlético Baleares reaccionó y el gol de Morillo parecía tumbar al filial. Nada más lejos de la realidad. En un final espectacular, Mbacke y Aziz lograron empatar un partido que comenzó fatal y terminó con un empate milagroso que, finalmente, supo a poco.
