Las lágrimas de Jenni Hermoso tras derrocar a Luis Rubiales y Montse Tomé: "Lo esperaba hace mucho tiempo"

360 días. Es la cifra que Jenni Hermoso ha tenido que esperar para volver a vestirse la camiseta de la selección española. La delantera madrileña ha vuelto a entrar en una convocatoria del combinado nacional de la mano de Sonia Bermúdez, nueva seleccionadora, y de este modo, deja atrás una historia de sufrimiento, esfuerzo y lucha enmarcada por el beso no consentido de Luis Rubiales y su posterior denuncia. Ahora, con dicho historial lejos en el horizonte, Jenni se confiesa sin pelos en la lengua.

Casi un año de espera

"Lloré cuando recibí la noticia, lo esperaba desde hace mucho tiempo", explicó la máxima goleadora de la historia de la selección española sobre su regreso al combinado nacional. El último día que Jenni se vistió la camiseta de La Roja fue el 29 de octubre de 2024, en un partido amistoso frente a Italia. En ese entonces, la seleccionadora era Montse Tomé, llegada a Las Rozas bajo el mando de Luis Rubiales, y a partir de ese momento decidió no volver a contar con ella.

Jenni Hermoso, en la rueda de prensa previa a la final de la Nations League EFE

El momento más complicado para Jenni fue su ausencia en la lista de convocadas para la Eurocopa. “Para mí, después de tanto tiempo, no tener una explicación coherente me hacía mucho más dolorosa la situación y es algo que me hizo sufrir mucho. Ser valiente e ir de frente a veces cuesta, pero lo prefiero mil veces. Hay conversaciones incómodas que hay que tener”, confesó Hermoso sobre su desconvoctaria del torneo europeo en RTVE.

"Momentos bastante duros"

Asimismo, con el caso por agresión sexual aún abierto y fuera de los planes de Montse Tomé en la selección, Jenni pasó por una mala etapa. “He tenido momentos bastante duros que en otras etapas de mi vida me hubieran costado remontar”, expresó la exjugadora del Barça Femenino. 

Finalmente, Hermoso confesó que en cierto momento vio su carrera en la selección española lejos de poder ser remontada y, de hecho, se planteó poner punto y final a su lucha por volver con España: “Cuando pasa tanto tiempo, te ves más de un lado --el de no volver a la selección-- que de otro. Se te pasa todo por la cabeza. Y yo deportivamente me sentía bien, así que no lo entendía”.