Las lesiones del Barça de basket exponen las carencias de la plantilla diseñada por Navarro

El Barça de basket ha protagonizado otra temporada de arrancada de caballo y parada de burro, mermado por las lesiones de dos pesos pesados como Nico Laprovittola y Chimezie Metu. El base argentino es uno de los puntales de la plantilla, y el pivote nigeriano, la gran revelación. Joan Peñarroya ha tenido que conceder más protagonismo a actores secundarios como Juan Núñez, un aprendiz que da sus primeros pasos como profesional.

Sin embargo, una de las mejores plantillas de Europa sigue repleta de recursos sobre la pista. Primeras espadas como la incorporación estrella Kevin Punter, Jabari Parker y Jan Vesely no han podido revertir la mala dinámica salvo en el último triunfo sufrido contra el UCAM Murcia (86-79): seis derrotas en los últimos 10 partidos. Las lesiones tienen culpa, pero esas bajas han expuesto varias carencias de la plantilla diseñada por el mánager de la sección, Juan Carlos Navarro.

Salto de calidad

En comparación con el verano de 2023, la leyenda azulgrana ha afinado la puntería en los despachos. La dirección deportiva ha dotado de músculo y físico al equipo catalán con la llegada de Chimezie Metu y Justin Anderson, y ambos han respondido sobre el parqué. Especialmente el primero, con pasaporte cotonou y en su primera experiencia europea.

La guinda del pastel es Kevin Punter, ese salto diferencial de calidad capaz de canastas inimaginables. El aumento de 7,8 millones de euros en el presupuesto de la sección se justifica con el fichaje de uno de los escoltas más cotizados del continente.

Problema defensivo

La llegada de Youssoupha Fall, un gigante de 2,22 metros de altura, también se dirigía a dotar de mayor físico la pintura. Sin embargo, el expívot del Asvel tampoco se caracteriza por sus dotes defensivas, más allá de su ventaja física. Por lo tanto, el problema defensivo en la pintura contra exponentes del rebote como Edy Tavares sigue vigente. Para más inri, el nivel del 5 senegalés ha resultado decepcionante, lejos de las exigencias de un club como el Barça.

Willy Hernangómez, el jugador que cobra el 15% de la masa salarial (4,5 millones al año), apenas promedia 13 minutos en Euroliga y 17 minutos en Liga ACB. Con Roger Grimau las diferencias explotaron en episodios como el famoso "te quedan dos telediarios". 

La dinámica no ha cambiado a las órdenes de Peñarroya, que ya ha castigado en el banquillo varias veces al pívot madrileño, con salario de estrella, en vista de sus discretas actuaciones. En cualquier caso, no desempeña el rol antiTavares que dejó vacante Sertac Sanli en 2023. Y en ataque tampoco ha mejorado las prestaciones del pívot por excelencia Jan Vesely.

Núñez, paso adelante obligado

Juan Núñez, de la quinta de 2004, apenas ha salido del nido del baloncesto formativo, aunque desde 2022 juega como profesional. El base mantiene un noviazgo con Lucía Navarro, jugadora del Barça Femenino de basket e hija de la bomba.

El problema reside en la baja de Lapro, que ha obligado al canterano del Real Madrid a dar un paso adelante en materia anotadora. Aun así, el base de 20 años destaca más en la dirección del juego.

Parche necesita parche

Navarro ha incorporado a Raul Neto como parche para la ausencia de larga duración del crack argentino hasta final de temporada. Sin embargo, en su debut contra el Real Madrid, apenas duró cuatro minutos sobre la pista antes de lesionarse del aductor. Un mes de baja.

El mánager del Barça de basket se la ha jugado con el base brasileño de 32 años, cuyo nivel está fuera de toda dura, pero que deja atrás otra grave lesión: rotura del tendón rotuliano durante el estreno del Mundial de 2023. La incógnita sobre el estado físico de Raulzinho es una desventaja que no ha inmutado a Navarro en su fichaje. El tiempo dirá si llena el vacío que deja el MVP de la Liga ACB 2018-19.