El Barça de basket sale con vida de Belgrado. La visita al feudo del Partizan se saldó con una importante victoria (79-87), donde Kevin Punter logró hacer gala de su talento ante su antiguo equipo. Los azulgranas se complicaron mucho la vida al casi desperdiciar una máxima de 23 puntos, pero reaccionaron al final con los ocho puntos del escolta estadounidense en el último cuarto.
Punter lideró al Barça con 18 puntos, seguido de los 17 de Jabari Parker. El conjunto dirigido por Joan Peñarroya mostró dos caras diferentes en Belgrado, aunque el talento diferencial de los dos jugadores norteamericanos permitió obtener la séptima victoria en la Euroliga y asentarse en la cima de la clasificación.
Parker y Metu aplastan
Los primeros minutos del compromiso fueron un dolor de cabeza para el Barça de basket, especialmente por la influencia anotadora de Isaac Bonga. El panorama no era el más alentador ante la poca contundencia defensiva en la pintura, pero la diferencia en el marcador (23-19) no fue un problema por los triples de Kevin Punter y Justin Anderson.
Los pupilos de Peñarroya cambiaron radicalmente en el segundo cuarto. Dominaron en el rebote y castigaron al rival con contragolpes a gran velocidad. Parker y Chimezie Metu causaron estragos en los minutos finales previos al descanso, lo que permitió al Barça dar la vuelta al resultado (35-49). Jabari estuvo desatado con un total de 13 puntos y cuatro rebotes.
El Barça perdona
Punter arrancó el tercer cuarto como una moto con cinco puntos que obligaron al Partizan a pedir tiempo muerto. El equipo serbio fue un manojo de nervios en esos minutos. El Barça de basket tuvo la contundencia para aprovechar esos errores del rival, sobre todo un Parker que siguió intratable en fase ofensiva.
La máxima diferencia entre los dos equipos fueron 23 puntos. El Barça se relajó en los minutos finales del tercer cuarto y los tiros exteriores dejaron de entrar. Brandon Davies, exjugador culé, desató la euforia de los locales con un triple que avivó ligeramente el partido (58-70).
Crisis en el Barça
El último cuarto fue un cúmulo de errores de lado y lado. Parker y Punter empezaron con varios puntos, pero poco a poco el Barça fue cayendo en imprecisiones que hicieron soñar al Partizan con la remontada. Peñarroya pidió tiempo muerto ante la complicada situación del partido, en especial por los problemas defensivos.
Dos triples consecutivos del Partizan recortaron la diferencia a tan solo cuatro puntos. El Barça entró en crisis por la incapacidad de defender el juego exterior. Tampoco estuvo acertado el ataque, debido a que en seis minutos solo fueron capaces de anotar cuatro puntos.
El salvador culé
En el momento más crítico del partido apareció la figura salvadora de Álex Abrines. No solo por el magistral triple anotado, sino también por un rebote que supuso una bombona de oxígeno para su equipo. La sentencia definitiva fue de un Punter con un par de puntos que permitieron salir con vida de Belgrado con una victoria clave en la Euroliga.