El Barça de basket ilusiona. Juan Carlos Navarro ha optado por hacer una gran renovación. El manager general se deshizo de Ricky Rubio, Rokas Jokubaitis, Oriol Paulí, Oscar da Silva y Nikola Kalinic. En su lugar entraron Juan Núñez, Kevin Punter, Justin Anderson, Chimezie Metu y Youssoupha Fall. La plantilla es más profunda y con más alternativas. Esta sábado (18.30 horas) llega la primera gran prueba de fuego: un Real Madrid-Barça de semifinales de Supercopa. Joan Peñarroya se enfrenta a su primer Clásico.
También a su primer gran dilema. De 14 jugadores, el entrenador catalán deberá descartar a dos. La decisión es complicada. El Barça se ha reforzado con algunos jugadores que deben ser imprescindibles, como Punter o Metu. Ahora bien, el rival que tendrá enfrente el club azulgrana puede determinar la convocatoria. Sobre todo por la presencia de Walter Tavares.
¿Cómo está Fall?
La temporada pasada, la diferencia entre Madrid y Barça era abismal. El factor que decantaba la balanza era el pívot caboverdiano. Roger Grimau no encontró respuesta al jugador de 2,21 metros de altura. Navarro, en los despachos, ha intentado buscar la solución: fichó a Youssoupha Fall, que mide exactamente lo mismo.
El problema es que, durante la última semana, Fall apenas se ha entrenado por culpa de un esguince en el tobillo izquierdo. El 5 senegalés se ha recuperado a tiempo para el Madrid-Barça y, posiblemente, entrará en la convocatoria para contrarrestar a Tavares. Los otros dos pívots son Willy Hernangómez y Jan Vesely, que son importantes.
Posición por posición
En el puesto de 4, Jabari Parker y Chimezie Metu son inamovibles. En el de alero, Álex Abrines, Justin Anderson no son discutibles. Quizás sí Joel Parra. En el puesto de escolta, Kevin Punter es un fijo. Más discutible es la presencia de Darío Brizuela. Más aún de la joven promesa Dame Sarr. Finalmente, como bases, Peñarroya contará con Juan Núñez, Tomas Satoransky y Nico Laprovittola.
La recuperación de Fall pone al técnico del Barça en un problema. Sarr, por probabilidad, será el primer descarte. Ahora bien, el segundo es más difícil de predecir. El club azulgrana tiene una plantilla profunda y con muchas opciones diferentes. Peñarroya está obligado a descartar a un segundo jugador. La elección puede ser decivisa contra un rival tan poderoso como el Madrid.