El Barça de basket es una montaña rusa. Capaz de ganar al mejor equipo de Europa y de perder con un equipo menor en la Liga ACB. Con Roger Grimau de entrenador, el Barcelona tiene desparpajo en ataque, pero es blando en defensa. Y tanto el técnico como Juan Carlos Navarro, esperan más de Willy Hernangómez, el fichaje estrella del pasado verano, que no descarta su salida del club.
Hernangómez deja abierta la puerta de salida del Barça si Grimau sigue de entrenador. Entre ambos no hay buena sintonía. El técnico pide más intensidad al pívot, quien el pasado verano firmó un contrato por tres temporadas y 12,5 millones de euros brutos. Mucho dinero.
Las dudas de Willy
"En el futuro no sabes lo que puede pasar, aunque estoy muy contento en el Barcelona", ha comentado Willy Hernangómez, quien recibió un mensaje de Navarro durante las pasadas fiestas navideñas, cuando el equipo sumó siete derrotas en 10 partidos. "La actitud de algunos jugadores no es aceptable", dijo el mánager general.
El futuro de Willy podría pasar por el Panathinaikos, club que ya lo quiso fichar el pasado verano y en el que, actualmente, juega su hermano Juancho. "Aprecio que me quisieran el verano pasado, para mí fue un momento en mi vida y en mi carrera en el que quería volver a España. Quería volver a disfrutar de cada partido de baloncesto, hace muchos años que no juego en Euroliga y ACB, estoy intentando volver a acostumbrarme a la liga. Me querían, me hicieron una oferta", manifestó el pívot madrileño.
Cambios en el Palau
El Barça prepara algunos cambios. El club no renovará el contrato de Oriol Paulí y, posiblemente, negociará una salida con Oscar da Silva, mientras que Jokubaitis y Nnaji podrían dar el salto a la NBA. Navarro, paralelamente, negocia con Jabari Parker y Kalinic las renovaciones de sus contratos. De momento, el Barça está más cerca de llegar a un acuerdo con el ala-pívot estadounidense, mientras sondea el mercado para fichar a un 4 mucho más físico.