El Barça de basket se salva de una noche complicada en la Euroliga. Después de dos derrotas consecutivas en la competición continental, el equipo de Roger Grimau logró sacar adelante un sufrido triunfo (80-85) contra el Zalgiris Kaunas en su feudo. La victoria supone una dosis de confianza para una plantilla que no ha logrado mostrar la continuidad deseada, aunque igualmente deja muchos puntos que se deben mejorar, como es el caso de la defensa y los tiros libres.
A pesar de esto, el Barça pudo salir victorioso lejos del Palau Blaugrana --no ganaban como visitantes desde el 23 de noviembre-- con una acertada versión de Nicolás Laprovíttola (18 puntos) y Jan Vesely (15 puntos y cinco rebotes). Entre ambos lideraron a un equipo que tuvo que sufrir en los minutos finales para mantenerse en el segundo lugar de la Euroliga.
La épica remontada en Kaunas
En este sentido, el elenco de Grimau tuvo un primer cuarto bastante positivo con el dominio de los triples, lo que permitió marcar distancias en el marcador. Pero poco a poco esa diferencia se fue recortando por la caída de los ataques del Barça de basket y los gigantescos problemas en defensa. En tan solo dos cuartos, el Zalgiris Kaunas pudo revertir la situación y llegar al tramo final con un panorama (73-70) más favorable.
Cuando solo faltaban cuatro minutos, el marcador se encontraba en contra de los culés por tres puntos de diferencia. Y fue justo en ese tramo final que lograron sacar adelante una versión más competitiva. Los cinco puntos de Tomas Satoransky y los tiros libres de Laprovittola dio a los suyos nuevamente la ventaja en el partido, sin dejar de lado la solida defensa a Evans.
De esa forma, los dirigidos por Grimau consiguieron romper una racha negativa de dos derrotas consecutivas en la Euroliga. Ahora el Barça de basket espera aprovechar este impulso anímico para dejar atrás las malas sensaciones del mes de diciembre. El siguiente encuentro en la competición europea será el próximo 29 de diciembre contra el Mónaco basket.