El corral llamado Real Madrid se ha convertido en un espacio de libre albedrío donde la convivencia entre gallos cada vez resulta más complicada. Carlo Ancelotti trata de mostrar su cara de padrazo en el vestuario, pero el técnico italiano no encuentra la fórmula para encajar una constelación de tantas estrellas. Sobre el campo, la falta de entendimiento y las individualidades ya han costado tres empates en Liga y una derrota en Champions League.
El sistema anárquico también ha dejado damnificados de menor estatus y experiencia en el Santiago Bernabéu. Valores jóvenes como Arda Güler y Endrick apenas pueden asomar la cabeza en el once titular, perjudicados por vacas sagradas como Vinicius Jr, Kylian Mbappé y Jude Bellingham. Precisamente, un fijo de la temporada pasada como Rodrygo Goes ha quedado eclipsado por el tridente de estrellas. También actores secundarios como Dani Ceballos y Brahim Díaz han quedado relegados por la alta competencia. En cuanto a los protagonistas, aquellos que gozan de minutos, hay varios señalados por sus actitudes egoístas y un rendimiento a la baja. El gran responsable del problema, Carlo Ancelotti.
Mbappé y Vini no se entienden
En el verde, el talante individualista y el bajón de las prestaciones de algunos puntales blancos como Vinicius Jr, Kylian Mbappé, Jude Bellingham y Aurelién Tchouameni han contribuido a la zozobra del navío madridista.
Las dos grandes estrellas madridistas han alcanzado el acuerdo salomónico de alternar en el lanzamiento de penaltis. No obstante, la libertad que les ha concedido Ancelotti sobre el campo no se ha trasladado en un mejor entendimiento. Más bien, al contrario. Tanto el 7 como el 9 en muchas ocasiones prefieren librar la guerra por su propia cuenta. Y Vini sigue en su línea de berrinche por cada estadio rival que pisa. El extremo brasileño acumula cinco goles y cinco asistencias en 13 partidos; ocho tantos y una asistencia en 12 encuentros el delantero francés.
Bellingham y Tchouameni, perdidos
En la zona de ataque, Jude Bellingham evidencia carencias tratando de tapar la ausencia de Toni Kroos. El mediapunta inglés ya no ejerce de falso 9 como antaño en sustitución de Karim Benzema, puesto que Mbappé se desempeña como delantero centro. Con esto, sigue sin encontrar su lugar de interior. Sus registros goleadores también han caído en picado. En la temporada 23-24, a estas alturas, ya sumaba 10 goles entre Liga (8) y Champions (2). Por el momento, tras nueve encuentros ha cosechado dos asistencias.
El anarquismo táctico tampoco ha ayudado en absoluto a Aurélien Tchouameni. El mediocentro francés no aporta el equilibrio necesario a la medular a falta de Kroos, y tampoco se adapta a la demarcación de tercer central, como evidenció en Balaídos. Más allá del ex del Mónaco, Lucas Vázquez y Fran García no funcionaron como carrileros. La grave lesión de Dani Carvajal pesa como una losa en el esquema de Carletto.
Ancelotti, gran responsable
Un tópico que suelen emplear los entrenadores para proteger al vestuario consiste en responsabilizarse a sí mismos de las dinámicas negativas. En este caso, Ancelotti tiene muchos deberes pendientes para realzar el vuelo en una semana clave contra Borussia Dortmund y el temible Barça de Hansi Flick. El técnico de 65 años tiene contrato hasta junio de 2026, pero el Real Madrid se guarda en la recámara la opción de una leyenda como Xabi Alonso, protagonista de un doblete histórico de Bundesliga y Copa Alemana el curso 23-24. El excentrocampista guipuzcoano también posee vínculo en el Bayer Leverkusen hasta 2026.
En cuanto al estratega italiano, no ha dado con la tecla en el esquema y alinea a ciertos jugadores priorizando el estatus por delante de la meritocracia. Esa libertad táctica que el míster brinda a los futbolistas para mayor comodidad ha resultado contraproducente. La anarquía ha dado paso al desorden. En consecuencia, el juego y los resultados se resienten.
Damnificados
En tanto, otros peloteros que apuntan maneras como Arda Güler (19 años) y Endrick (18 años) deben aguardar su ocasión de brillar en los minutos de la basura. La perla turca ha participado 10 partidos, pero solo tres de titular, y suma 291 minutos oficiales. Por su parte, el delantero brasileño ya ha conseguido dos goles en ocho apariciones, una de inicio y 106 minutos.
Rodrygo, una de las tres patas del tridente en la temporada 23-24, ha sufrido un descenso de sus participaciones tras el fichaje de Mbappé. Aun así, ha logrado salir de titular ocho veces y cuatro de suplente. Pese a desempeñar un rol menos protagonista, ha marcado tres goles y ha entregado una asistencia en esos 797 minutos.
Dani Ceballos sigue peleado con la titularidad. Solo ha podido vestirse de corto en cuatro partidos, uno de inicio y un total de 79 minutos. Para más inri, sufrió un esguince en el tobillo derecho a principios de septiembre. Un caso parecido a Brahim Díaz, con una lesión muscular sobre las mismas fechas y una participación de seis encuentros: dos de titular, tres de suplente, 127 minutos, un gol y una asistencia.
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