Derbi polémico, derbi intenso. El Estadio Metropolitano ha vivido uno de los partidos más intensos de los últimos años entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid, donde los dos equipos empataron (1-1). No fue una exhibición de fútbol, debido al poco riesgo asumido en la primera mitad y el lanzamiento de objetivos que ha provocado que el encuentro fuera suspendido por varios minutos. Ángel Correa fue el encargado de rescatar a los colchoneros con un gol validado por el VAR que permite al Barça de Hansi Flick respirar en la cima de la Liga.
El FC Barcelona sonríe y descansa tranquilamente después del resultado del derbi madrileño. La derrota en casa del CA Osasuna podía dejar la diferencia entre culés y merengues a un solo punto, pero ahora el panorama del equipo de Hansi Flick es mucho más favorable. Son 21 puntos los que tiene el Barça, mientras que el Real Madrid se mantiene en la segunda posición 18 puntos y el tercer lugar se lo queda el Atlético de Madrid con 16 puntos.
Sin hacerse daño
La primera mitad del derbi fue de mucha concentración defensiva. Ningún equipo pudo hacerse grande en ataque. El Real Madrid tuvo un tramo inicial de mucha posesión, pero sin profundizar por completo dentro del área rojiblanca; mientras que el Atlético de Madrid pudo crecer en varios tramos, aunque sin inquietar en exceso al arco protegido por Courtois.
Solamente las participaciones de Vinicius y Julián Álvarez provocaron algo diferente en la primera mitad. Fue un ejercicio de mucha resistencia por parte de los dos equipos, lo que dejaba claro los pocos riesgos que buscaron asumir. Los de Simeone tuvieron la oportunidad de hacer daño por la floja salida de balón merengue, pero había demasiado miedo en provocar una pérdida que se convierta en una acción de peligro para el elenco de Ancelotti.
Escándalo (y gol) en el derbi
El compromiso transcurría con total normalidad, especialmente por las pocas faltas de peligro. La situación cambió radicalmente a partir del gol de Eder Militao, después de una jugada preparada por el Real Madrid en un tiro libre que tuvo la polémica arbitral por una falta inexistente a Vinicius. El tanto del cuadro blanco fue el punto de partida del caos que se generó en la segunda mitad, debido a que varios ultras rojiblancos lanzaron mecheros y botellas de agua a los merengues.
Los objetos fueron con dirección a Militao y Courtois. El árbitro principal, Busquets Ferrer, no dudó en suspender el partido por 15 minutos hasta que el ambiente en el Metropolitano fuera más tranquilo. Los dos equipos se incorporaron nuevamente al terreno de juego, pero la intensidad creció considerablemente entre los futbolistas, especialmente con Vinicius como el principal protagonista.
El héroe colchonero
Los minutos pasaron y el panorama del Atlético de Madrid no era el mejor. En el tiempo añadido no dejaron de buscar el empate y, para fortuna del FC Barcelona, apareció la recompensa con el merecido gol de Ángel Correa. El delantero argentino pudo superar la resistencia de Courtois con mucha fortuna y un remate a puerta vacía. Hubo nerviosismo por las líneas de fuera de juego, pero el atacante estaba en posición legal, lo que significaba el empate definitivo en el derbi.