Se acabó el sueño de Thibaut Courtois. El jugador belga dice adiós a la temporada. El portero del Real Madrid se ha roto el menisco interno de la rodilla derecha en el último entrenamiento. El guardameta se ha retirado entre lágrimas de la sesión en Valdebebas y las pruebas han confirmado los temores. Este percance echa al traste la progresión del jugador, que se encontraba en la recta final de su recuperación.
"Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro jugador Thibaut Courtois se le ha diagnosticado la rotura del menisco interno de la rodilla derecha. La lesión se ha producido durante la sesión de entrenamiento de hoy. Pendiente de evolución", ha anunciado el club madridista en un comunicado.
Mes y medio de baja
Según han informado otros medios españoles, el cancerbero notó un crac en la pierna durante el entreno. En un primer momento se temieron lo peor, incluso una nueva rotura del ligamento cruzado. Dentro de lo que cabe, las exploraciones han supuesto un alivio. La nueva dolencia se localiza en la otra rodilla. No obstante, el precio a pagar serán otras seis o siete semanas de baja.
A principios de marzo, Carlo Ancelotti aventuró que Courtois y Eder Militao podrían regresar a mediados de abril: "Tenemos que aprovechar el parón de selecciones y luego el mini parón de la final de la Copa del Rey. En ese momento harán tareas con el equipo. Tras el 14 de abril, tras el Mallorca, podrían estar".
Lunin se afianza
Este nuevo contratiempo obligará al técnico italiano a seguir con Andriy Lunin y Kepa Arrizabalaga bajo palos. Salvo milagro, bastante improbable en vista del riesgo de recaída, Courtois no regresará a los terrenos de juego hasta la temporada que viene.
A pesar de que el portero propiedad del Chelsea recaló cedido en sustitución de Courtois, hasta la fecha ha jugado menos partidos que el meta ucraniano: 18 encuentros por 23 del meta titular.