El Real Madrid vive días tranquilos. De momento. Líder de la Liga y candidato a ganar la Champions. Su bonanza contrasta con la crisis de un Barça angustiado por su precaria situación económica, pero el club que preside Florentino Pérez sueña con un fichaje de campanillas. El de Kylian Mbappé. El delantero francés, muy deseado por el máximo dirigente y la afición, no será fácil de gestionar por Carlo Ancelotti.
Ancelotti es un tipo tranquilo. Un entrenador muy cercano al futbolista, un gran desactivador de tensiones. Gestiona muy bien los egos que hay en el vestuario y tácticamente no se complica la vida. Tan contentos están con él, que el presidente renovó su contrato.
Las estrellas del Madrid
El fichaje de Mbappé, sin embargo, puede ser una bomba de relojería en el vestuario madridista. Ancelotti ha logrado una buena convivencia entre Bellingham, Vinicius y Rodrygo. Con Mbappé, la cosa se puede complicar.
Mbappé llegaría al Real Madrid como estrella. Como el gran símbolo del equipo. Y en Madrid recuerdan que su convivencia con Messi y Neymar nunca fue fácil en el PSG. En la selección también tuvo sus discrepancias con Benzema.
El futuro de Vinicius y Rodrygo
El Real Madrid, eso sí, tendría un gran potencial ofensivo con Bellingham, Brahim, Vinicius, Rodrygo, Josele y Mbappé. Y Ancelotti debería encajar bien las piezas.
En Madrid, no obstante, se especula con la posible salida de algún futbolista. El menos satisfecho con el fichaje de Mbappé podría ser Vinicius, pero quien tiene más números de ser traspasado sería Rodrygo. El club blanco podría tasar al extremo brasileño en 70 millones de euros.