Carlo Ancelotti siempre quiere más de sus jugadores, que sean capaces de sacar lo mejor de su potencial. Es un entrenador que se muestra frontal al momento de hablar de sus dirigidos, aunque a veces eso ayuda a generar un poco de tensión extra dentro del vestuario del Real Madrid. En este sentido, el italiano ha vuelto a señalar a un crack de su equipo en la previa de la Supercopa de España, lo que promete provocar una mayor crispación.
En la rueda de prensa previa al compromiso contra el Atlético de Madrid, el director técnico merengue sorprendió con sus palabras al manifestar que Fede Valverde necesita ser más agresivo. "Yo creo que puede ser incluso mejor de lo que ya es. Una persona muy humilde que entiende que es fuerte; y este perfil es bueno, lo prefiero a alguien arrogante... pero, a veces, tener un poco de arrogancia te hace reforzar tu carácter", comentó Ancelotti.
Esa cuota de arrogancia y agresividad que quiere el entrenador del centrocampista uruguayo podría provocar una versión mucho más feroz de un futbolista que recordemos protagonizó una enorme polémica al pegar a un puñetazo a un compañero de profesión como es Álex Baena. A pesar de mostrar actualmente una imagen muy intensa, la intención de Ancelotti es que Fede Valverde pueda potenciar esa parte de su futbol, siendo una estrategia que puede elevar la tensión en el vestuario.
La titularidad está cara
Si hay algo que puede presumir el Real Madrid es que cuenta con una diversa cantidad de jugadores en la mitad de cancha. Es la zona del campo más poblada, lo que implica una enorme competencia por un puesto en el once de gala. El hecho de que Ancelotti quiera que Valverde tenga una mayor cuota de agresividad puede provocar que la tensión entre los futbolistas de la plantilla crezca, en especial porque algunos exigen tener un lugar fijo en el equipo.
El caso más destacable es el de Luka Modric, que en más de una ocasión ha dejado claro que no le gusta tener un rol secundario en la plantilla. Aunque la edad del croata facilita que Ancelotti haga uso de su variedad de centrocampistas para afrontar todas las competiciones: Toni Kroos, Eduardo Camavinga, Aurélien Tchouaméni, Dani Ceballos y Fede Valverde. Todos quieren su puesto en el once de gala, por lo que se espera un ambiente más denso en el vestuario en lo que resta de temporada.