Los nueve señalados tras el desastre del Barça en Stamford Bridge: no se libra ni Flick

Desnortados. El FC Barcelona no tiene una dirección fija esta temporada. Parece que avanza por los derroteros correctos, como sucedió tras vencer al Celta y al Athletic, y luego sufre un revés como el vivido en Stamford Bridge (3-0). El barcelonismo afrontaba con ilusión el choque contra el Chelsea precisamente porque volvía a ver a un equipo reconocible, pero que finalmente terminó con una larga lista de señalados.

Un listado en el que debe aparecer Hansi Flick. Enzo Maresca edulcoró el partido con elogios hacia su estilo y alabando la figura de Pep Guardiola. Encontró la manera de hacer daño. Contra 10, pero también contra 11. En Stamford Bridge, no hay equipo que no padezca ante el Chelsea, que no paró de encontrar superioridades por dentro y superar la presión del Barça.

Dos pesos pesados

Más habituales que el técnico de Heidelberg son Ronald Araujo y Frenkie de Jong, dos nombres a los que ya cuesta desvincular de las noches negras en Europa. El central charrúa ya apareció en las fotos de los duelos ante París Saint-Germain hace dos años, contra el Inter de Milán la temporada pasada y en la de Stamford Bridge el pasado martes.

Ronald Araujo, expulsado del Chelsea-Barça por doble tarjeta amarilla EFE

Liam Delap da la mano a Frenkie de Jong tras la victoria del Chelsea contra el Barça en la Champions League EFE

Araujo arrolló a Marc Cucurella teniendo una amarilla por protestar, antes del descanso, y cuando su equipo perdía. Cuando se llevó por delante a Bradley Barcola, el Barça tenía dos goles de ventaja, no perdía el partido, y la entrada fue sin intencionalidad. Lo sucedido ante el Chelsea fue una temeridad.

Frenkie de Jong, por su parte, no terminó expulsado, pero su partido no se correspondió con los galones que le otorga Flick. Ante el Athletic, Dani Olmo hizo de Pedri. El Barça jugó mejor. El 21 azulgrana fue transparente: no ganó un duelo y defendió sin alma la frontal del área. El entrenador alemán valora su capacidad de conservar la pelota, pero no facilitó en ningún momento la salida de presión.

Dudas en defensa

También quedó señalado Jules Koundé. El lateral francés no está tan fino como la temporada pasada. En área propia, no fue capaz de despejar un balón que quedó enganchado entre sus piernas y las de Ferran Torres y acabó metiéndoselo en propia portería. Es necesario que la banda derecha vuelva a ser como la de antaño.

Autogol de Koundé que supuso el 1-0 del Chelsea contra el Barça EFE

Y también que Pau Cubarsí vuelva a su mejor nivel. El central de Estanyol necesita una pareja de garantías. Fija, que no vaya cambiando. Araujo fue su dupla, un hecho que le desplazó al perfil izquierdo. Con Gerard Martín en la zaga, el Barça carburó mucho más ante el Athletic.

El talento de Olmo y Lamine

Por otra parte, el equipo necesita más que nunca la mejor versión de Dani Olmo. No hay nadie como el mediapunta egarense en espacios reducidos. Tampoco nadie tan desequilibrante como Lamine Yamal. El genio de Rocafonda empezó el encuentro europeo como un tiro, pero se fue apagando a medida que el equipo no le hacía llegar balones. Debe centrarse y mostrar todas sus cualidades.

Marc Cucurella y Lamine Yamal, durante el Chelsea-Barça de Champions League REDES

Ferran Torres, seguido por Moisés Caicedo en el Chelsea-Barça de la Champions League FCB

En esta tarea ayudará mucho Raphinha. El 11 culé está recuperando la forma y, cuando vuelva a la alineación titular de manera definitiva, el Barça se hará mucho más fuerte en la presión y recuperará muchísimos más balones, una faceta en la que precisamente queda señalado Marcus Rashford. El extremo inglés no aportó nada durante los 45 minutos que estuvo en el verde. 

A pesar de sus aportaciones estadísticas, las sensaciones en cuanto a su encaje en el estilo azulgrana no terminan de ser las mejores. Ferran Torres también suma en la delantera, pero en Europa no se pueden fallar ocasiones como la que erró nada más empezar el partido en Stamford Bridge. Todo podía haber sido muy distinto si no le hubiera fallado la puntería.