
Joan García posa con la camiseta del Barça tras firmar su contrato FCB
La última campaña de odio contra el Barça tras evitar la fuga de talento español a la Premier
Aficionados de clubes españoles, principalmente del Athletic y del Espanyol, están muy molestos con el conjunto azulgrana y lo demuestran en las redes sociales
Noticias relacionadas
- Los 'pellizcos' que engrosan la tesorería del Barça y ayudan con la regla del 1:1 del Fair Play
- Las tres claves económicas que marcan el fichaje de Nico Williams por el Barça
- Ni Botafumeiro ni Via Veneto: Deco, Echevarría y Bojan se reúnen con un agente en un restaurante mítico de Barcelona
- Frenazo a las negociaciones: el sueldo de un crack del Barça amenaza con torpedear el mercado de fichajes
- El club ruso que se ofrece a financiar el fichaje de Nico Williams por el Barça
- El gesto de crack de Joan García con la afición del Barça en una presentación no exenta de polémica
Los movimientos por Joan García y Nico Williams han desatado el último capítulo de odio contra el FC Barcelona. Los aficionados muestran su molestia con el elenco culé en redes sociales. Principalmente, los más enfadados son los del RCD Espanyol y del Athletic Club, clubes relacionados con los objetivos de este mercado del cuadro azulgrana. No obstante, existe cierta ira generalizada que viene de largo.
La realidad es que el Barça está apostando por una política de fichajes de jugadores españoles. No con objetivo de expoliar al resto de equipos de la Liga, ni mucho menos. Entre talento nacional y extranjero, apuesta por lo formado en España. Motivos hay varios, uno de los más potentes es la relación con los canteranos de la Masía, nacidos también en territorio ibérico. La realidad es que la entidad dirigida por Joan Laporta está evitando una fuga de talento hispano hacia otras ligas, principalmente la inglesa.
Las palancas, el origen
Fruto de la rivalidad con ambos clubes, los aficionados del Real Madrid y el RCD Espanyol siempre se han mostrado muy críticos con el Barça. Es algo clásico y normal. No obstante, en el tiempo pospandemia, se fraguó una molestia general hacia el cuadro barcelonista. Todo empezó con CVC. El fondo de inversión hizo una oferta a los clubes de Primera y Segunda División para comprarle el 10'95% de los derechos televisivos de los próximos 50 años por 2.668 millones de euros.

Javier Tebas, presidente de la Liga, en una imagen de archivo LALIGA
La oferta era considerada, de forma generalizada, como mala. No obstante, los efectos de la pandemia tenían ahogados a los clubes, que luchaban por reforzar sus plantillas ante el férreo Control Económico de la Liga. Firmaron 38 de los 42 equipos que conforman el fútbol profesional Español. Solo la rechazaron Barça, Real Madrid, Athletic Club y Real Oviedo. Por su parte, el cuadro azulgrana consiguió firmar un acuerdo de 25 años por el 10% de los derechos televisivos de la competición doméstica con Sixth Street. Esta fue la primera llamada palanca, algo que generó tensiones.

Joan Laporta, en un fotomontaje con el logo de Sixth Street CULEMANÍA
Polémicas del Barça
La entidad presidida por Joan Laporta sufría, y todavía sufre, aunque en menor medida, por su situación económica. Así pues, comenzó a tirar de palancas financieras. No eran inyecciones ilegales de dinero, sino ventas de activos del club aprobadas por la Liga. Sin embargo, los aficionados de los clubes se han mostrado muy molestos. La afirmación que más se repetía es que "el Barça juega con otras reglas". Las críticas fueron generalizadas, pero a los athleticzales se les quedó grabada la molestia.

Laporta y Roures sellan su acuerdo para la venta de Barça Studios el verano de las palancas CULEMANIA
Con la explosión del Caso Negreira, los aficionados de los clubes que conforman el campeonato español volvieron a explotar contra el FC Barcelona. Al ver que no se encontraba nada respecto a amaños o compra de árbitros, las críticas se focalizaron principalmente en pericos, madridistas y los nuevos haters, los seguidores del Athletic Club. Véase el caso de los billetes impresos con la cara de Negreira en San Mamés en 2023.

La lluvia de billetes de San Mamés contra el Barça en 2023 EFE
Joan García y Nico Williams
La situación de la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor volvió a encender la molestia contra el Barça. Si bien fueron casos malos para la reputación del club, la realidad es que quien declinó la balanza hacia el cuadro azulgrana fue el Consejo Superior de Deportes, un tribunal estatal. Es decir, que la entidad catalana no hizo nada fuera de las reglas aplicables para todos los clubes.

Dani Olmo y Pau Víctor, los nuevos fichajes del Barça, posan con Hansi Flick
Por otra parte, con el fichaje de Joan García y los avances con Nico Williams, los aficionados, principalmente de estos elencos aunque se han sumado haters que siguen a otros equipos, se han enrabietado. Se critica la supuesta traición, entendible en el caso del portero, de los jugadores que desean fichar por el Barça. Es decir, el cuadro azulgrana es tratado como el enemigo público. Parece que ciertos fans no quieren que los profesionales miren por sus carreras.

El presidente del Barça, Joan Laporta, en un montaje con Joan García y Nico Williams MONTAJE CULEMANIA
Fuga de talento
Los seres humanos acostumbran a ser ambiciosos. Los futbolistas quieren ganar títulos. Los clubes grandes ganan trofeos. Al partir de estas tres afirmaciones, se entiende que jugadores de equipos españoles busquen nuevos destinos en los que luchen por tocar metal. El Barça es uno de los proyectos más prometedores del mundo, pues junta juventud y talento.

Los jugadores del Barça celebran el triplete nacional con la afición en Montjuïc FCB
En este contexto, se entiende que Deco se fije en jóvenes talentos españoles para reforzar la plantilla que dirige Hansi Flick. Si hay acuerdo entre ambas partes, se paga un traspaso. Se trata de un acuerdo comercial, no hay un robo o secuestro. No obstante, los aficionados de los clubes, en este caso Espanyol y Athletic, sienten molestia porque sus jugadores se vayan al conjunto de la capital catalana. De esta manera, los capítulos de odio contra la entidad presidida por Joan Laporta se suceden.

Lamine Yamal saluda a Nico Williams antes del Barça-Athletic EFE