Pedri marca el camino del Barça aspirante a todo: el movimiento suicida de Flick contra el Atlético

El Barça de Hansi Flick es un equipo de autor. Muy bien trabajado. Vive de la magia de Lamine Yamal, de los goles de Robert Lewandowski, de la autoridad de Pau Cubarsí, pero pierde todo el sentido y el orden si no está Pedri en el campo. No hay prueba más fidedigna que la debacle final en Montjuïc, cuando el Atlético de Madrid igualó las semifinales de la Copa del Rey gracias a un gol de Sorloth en el tiempo extra (4-4), sin el mago de Tegueste en el terreno de juego.

Hay dos Barças diferentes, uno con Pedri sobre el verde y otro sin él. Hansi Flick decidió darle unos minutos de descanso contra el Atleti, sacando al mediocentro tinerfeño en el minuto 85 de partido, cuando el marcador era de 4-3. El equipo azulgrana pasó de tener el control absoluto del encuentro a perderlo por completo.

El desconcierto absoluto

Flick pecó de valiente. Hizo coincidir en el campo a Éric García, que había entrado en su lugar, a Gavi, a Fermín López y a Frenkie de Jong. Con solo un gol de diferencia en el electrónico, el Barça se había quedado sin su centrocampista organizador. El que baja a recibir y da claridad a las jugadas, y el que da el último pase.

Pedri y Frenkie de Jong se felicitan en Montjuïc, tras el gol del volante canario al Atlético de Madrid EFE

Desde su salida del campo, todo fueron balones largos, malas decisiones, cero fluidez con el balón. El Barça había perdido el norte totalmente. Durante aquellos meses de lesión de Lamine Yamal, a los de Flick les costó ganar partidos. Ahora bien, el pasado martes quedó demostrado que Pedri es igual, o más, de insustituible.

El Pedri más maduro

Fue uno de los líderes de la remontada del Barça al Atlético. También uno de los culpables, según él mismo, del primer tanto del conjunto del Cholo Simeone. Tras los 90 minutos, Pedri mostró mucha serenidad y una capacidad admirable de hacer autocrítica.

"El primer gol es a balón parado de un rebote, se me va la marca. Es un fallo totalmente mío", aseguró el mediocentro del Barça. "El segundo es una pérdida nuestra. Son cosas que debemos mejorar. Me quedo con cómo ha reaccionado el equipo tras el 0-2", añadió.

Mucha autocrítica

Pedri fue muy taxativo: "El resultado es malo. Teníamos que ser más inteligentes con balón. No estamos listos ahí". "Tenemos que haces posesiones más largas e ir a buscar el quinto gol, pero con cabeza. Sin balón tenemos que presionar mejor y, si no podemos, ir más atrás", analizó.

Era muy fácil decirlo, pero menos hacerlo. A menos que seas el propio Pedri. El barco, sin el timón, no toma la dirección adecuada. Esto fue lo que sucedió en Montjuïc. Flick lo sabe mejor que nadie.

'Pedridependencia'

Con frases muy sencillas, Pedri examinó el encuentro a la perfección. Ya actúa como un capitán, algo que le dice su entrenador y a lo que resta importancia: "Eso es lo que me dice Flick, pero no me importa, solo me importa que el equipo gane".

Hansi Flick aplaude una acción del Barça contra el Atlético EFE

Pedri también fue capaz de sacar conclusiones positivas del encuentro. "Me quedo con que en los 70 minutos hemos hecho un gran partido. Cuando jugamos así somos casi imaprables", sentenció.

Flick toma nota

Flick seguro que tomó nota del partido. Vio que el Barça se convirtió en un flan, en un equipo sin capacidad de dar dos pases seguidos sin el cerebro del mago de Tegueste en el campo. En el Metropolitano, cuando la vuelta de las semifinales se juegue, dentro de un mes, Pedri seguro que no se pierde ni un segundo de partido.

Pedri, en la firma de su nuevo contrato con el Barça hasta 2030 FCB

Una de las mejores noticias de este año fue la renovación del mediocentro tinerfeño. Hasta 2030, Barça y Pedri seguirán de la mano. El barco, diseñado por Hansi Flick, no se quedará sin el capitán de la tripulación. Pasar a la final de la Copa del Rey es posible gracias a Pedri. También ganarlo todo.