El abrazo entre Lamine Yamal y Jules Koundé tras marcar un gol ante el Betis en Montjuïc

El abrazo entre Lamine Yamal y Jules Koundé tras marcar un gol ante el Betis en Montjuïc SIMÓN SÁNCHEZ CULEMANÍA

Primer equipo

Lamine Yamal y Koundé, la mejor conexión en la banda derecha del Barça desde la era Messi-Alves

La excelente química de los dos futbolistas hace trizas al Real Betis en octavos de Copa del Rey

Más información: El Barça se abona a la ‘manita’ y pasa por encima del Betis como una apisonadora

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Durante muchos años la banda derecha del FC Barcelona fue el foco del juego ofensivo del primer equipo. No solo por Leo Messi, sino también por Dani Alves. Entre ambos firmaron una de las mejores sociedades de la historia del fútbol, en especial por la gran cantidad de goles que fabricaron. El fin de esa era supuso un duro golpe para el Barça, debido a que ningún jugador logró llenar ese vacío.

Sin embargo, esa nostalgia por el ciclo Messi-Alves empieza a desaparecer, debido al sensacional rendimiento de la sociedad entre Lamine YamalJules Koundé. Ya en la anterior temporada demostraron que tienen una enorme química en los terrenos de juego, pero con Hansi Flick esa alianza se ha potenciado hasta convertirse en un arma letal para la causa azulgrana.

Destrozan al Betis

Tanto el extremo como el lateral se hicieron cargo de hacer trizas al Real Betis (5-1) en los octavos de final de la Copa del Rey. Los futbolistas verdiblancos no dieron con la clave para frenar a dos culés que mezclaron en diferentes alturas de la banda derecha. La prueba de ello fue el espectacular gol de Koundé tras un pase de primera de Lamine en ese sector del campo.

Koundé señala a Lamine tras anotar el gol contra el Betis

Koundé señala a Lamine tras anotar el gol contra el Betis FCB

Koundé estuvo cerca de llevarse dos goles a la bolsa, pero el VAR lo impidió tras decretar un milimétrico fuera de juego. Esa polémica acción invalidada igualmente deja en evidencia que los dos futbolistas del FC Barcelona se entienden a las mil maravillas. Esto supone para el equipo azulgrana focalizar el juego en la banda derecha, tal y como sucedía en la época de Leo MessiDani Alves

Se necesitan

Lamine necesita a Koundé y Koundé necesita a Lamine. Ambos se potencian en la banda derecha del ataque. El joven canterano se beneficia del talento sin balón del lateral francés, que suele pedirle mucha concentración y responsabilidad para las ayudas defensivas. Jules sirve de escudero para la estrella del Barça, lo que representa una bendición para Flick.

Lamine Yamal celebra el quinto gol del Barça al Betis

Lamine Yamal celebra el quinto gol del Barça al Betis Culemanía

Por su parte, Koundé también saca un enorme provecho de la presencia de Lamine en el extremo derecho. El crack de Rocafonda simplifica todas las jugadas en ataque para que el lateral francés sea capaz de proyectarse con la mejor ventaja posible. Al no ser un futbolista con tanta vocación ofensiva, la magia de Yamal es clave de cara a que pueda recibir el esférico sin demasiada resistencia.

Dos armas para el Barça

El FC Barcelona recupera la sonrisa. Lamine YamalKoundé son dos armas de primer nivel que permiten al equipo enfocar todo el juego en derecho para generar los espacios en banda contraria. De ese talento con balón de extremo y lateral sale como gran ganador Raphinha, especialmente por su capacidad para aprovechar cada uno de los pases de sus compañeros en los metros finales.

Koundé y Lamine celebran el segundo gol del Barça

Koundé y Lamine celebran el segundo gol del Barça EFE

Si Raphinha ha potenciado mucho sus cifras en ataque es por focalizar su fútbol a la definición. Flick sabe esto y le pide al extremo brasileño que ataque la profundidad, algo en lo que destaca como pocos en el mundo. Sus desmarques son una invitación para que LamineKoundé le den constantes pases para atacar al arco rival. Esa fue precisamente la vía de su primer gol anotado contra el Real Madrid tras el largo pase que recibió del lateral derecho.

Hay lateral

Antes Koundé se cerraba a la idea de ser lateral derecho. El galo siempre ha dejado claro que disfruta jugar como central, pero las necesidades del Barça lo obligaron a cambiar de rol en el campo. Todavía sufre de desconexiones defensivas, pero es una certeza competitiva cuando logra coincidir con Lamine Yamal, que con 17 años ya es una gran influencia para sus compañeros en el terreno de juego.