El Barça se apaga. Día tras día. Los brotes verdes de Son Moix no tuvieron continuidad en el Benito Vilamarín. Futbolistas como Cubarsí, Iñigo Martínez, Marc Casadó, Pedri, Raphinha, Lewandowski y, sobre todo, Lamine Yamal no están bajo sospecha, pero hay casos que claman al cielo. Frenkie de Jong sigue en baja forma y Balde no reacciona, pero a Hansi Flick también le preocupan otro futbolista.
El caso más evidente del receso del Barça es Jules Koundé. El defensa francés, reconvertido a lateral por necesidades del guion, comenzó muy bien el curso, disputando todos los partidos y en un estado de forma excepcional.
El Espanyol
"Tú puedes decírselo, tú puedes decirle a Koundé que descanse. Es increíble. Nunca había tenido un jugador así antes. Después del partido, quiere entrenarse", manifestó Flick en rueda de prensa.
Hoy, Flick no tiene la misma opinión de Koundé. Es un futbolista que va a su bola, poco puntual, y eso desespera al entrenador del Barça. Contra el Espanyol ya fue suplente. Ese día quedó claro que algo iba mal.
Koundé ya no es el futbolista expeditivo de principios de temporada. Comete muchos errores en todos los partidos por falta de concentración. En el campo del Betis también estuvo despistado en sus duelos con Abde.
Las cifras de Koundé
El defensa internacional se redimió con el primer gol del Barça, fabricado entre Pedri, él y Lewandowski. Su asistencia fue meritoria. Su fragilidad defensiva, en cambio, fue un tormento para el equipo.
Esta temporada, Koundé ha participado en 22 partidos con el Barça en los que ha marcado un gol y ha dado seis asistencias. Su mejor actuación fue en el campo del Estrella Roja, al dar tres goles a sus compañeros. Con contrato hasta 2027, su actual valor de mercado, según Transfermarkt, es de 55 millones de euros, una cifra importante para un club con tensiones en la tesorería.