Hansi Flick ya tiene que seleccionador las piezas ideales en los últimos partidos del Barça. Partido tras partido debe prescindir de futbolistas con mucha clase, sobre todo en el centro del campo. Uno de los jugadores que pierde protagonismo es Fermín López (21 años), suplente habitual en las grandes citas.
Fermín, no obstante, fue titular en el Bernabéu. El problema es que Frenkie de Jong, su sustitutuo, fue una de las claves de la goleada del Barça ante el Real Madrid. Suplente ya contra el Espanyol, el centrocampista andaluz debe competir con Dani Olmo.
Dani Olmo
Dani Olmo y Fermín son mediapuntas. El primero es más determinante. Lee mejor el juego y tiene mucho gol. Al menos, con el Barça. El segundo es más dinámico e intenso.
Fermín, un futbolista que nunca se resigna, busca soluciones y se ofrece para jugar en otras posiciones. Por ejemplo, en la banda izquierda. También podría jugar como interior, aunque brilla más cuando está más cerca del delantero centro.
"Es verdad que hay muchos jugadores en el centro del campo de mucha calidad, pero la competencia interna es muy buena", destacó Fermín en la rueda de prensa previa al Estrella Roja-Barça. "Yo jugaré en la posición en la que el míster me necesite. Creo que puedo jugar en muchas posiciones. Estamos con mucho acierto y haciendo muchos goles. Tenemos que seguir así para conseguir grandes resultados", añadió el centrocampista andaluz.
Intensidad y movilidad
Esta temporada, Fermín ha participado en siete partidos entre Liga y Champions. Todavía no ha marcado un gol, pero ya ha dado dos asistencias. Y su actual valor de mercado, según Transfermarkt, es de 50 millones de euros.
Flick, de momento, está satisfecho con el rendimiento de Fermín, un jugador muy útil para revolucionar los partidos por su intensidad y movilidad, válido como mediapunta, pero también como falso extremo por la banda izquierda. En Belgrado espera una nueva oportunidad.