Un gol por bajo y otro con un cabezazo perfectamente ejecutado. Dos remates al palo izquierdo de Lunin iniciaron la fiesta del Barça en el Bernabéu, con Robert Lewandowski como maestro de ceremonias. El delantero polaco ya suma 14 en la Liga y tres en la Champions, unos números impresionantes que explican la espectacular transformación del equipo azulgrana.
Lewandowski fue el fichaje estrella de Laporta en 2022, en el verano de las palancas. No pudo contratar a Haaland y llamó a su amigo Pini Zahavi para que facilitara la llegada del crack polaco, medio peleado con el Bayern de Múnich. Y en sus primeras dos temporadas cumplió, mejor en la primera que en la segunda, pero es ahora cuando se ha desatado.
Casadó y Balde, asistentes
Con Flick de entrenador, el Barça es un equipo más directo y vertical, pero destrozó al Real Madrid cuando tuvo la pelota y Lewandowski apovechó una asistencia de Casadó y un centro medido de Balde. En un plis-plas, Robert se comió a Rudiger y Militao y sentenció el clásico.
Lewandowski fue una pesadilla para el Real Madrid. A los 36 años, es un delantero fiable, letal. No tiene el Barça recambio para él, encantado con tener socios de gran nivel como Lamine Yamal y Raphinha. El primero, a sus 17 años, es el nuevo Messi. El segundo no es el mismo futbolista de la pasada temporada. Es un arma letal de destrucción masiva.